En los últimos dos años, se ha producido un fuerte proceso de consolidación en la industria logística mundial derivado de la tendencia de las grandes empresas multinacionales (MNCs) a simplificar su manejo logístico buscando operadores externos (los llamados third-party logistics providers, o 3PLs) capaces de ofrecer un servicio global.

Entre las fusiones y adquisiciones que han sacudido al mercado en este período, DHL se fusionó con Exel, un gigante británico del negocio de la carga, creando la mayor empresa logística del mundo. Además, la empresa kuwaití PWC Logistics adquirió a la gigante californiana GeoLogistics; UPS compró a la empresa de transporte rutero Overnite Transportation; y Schneider Logistics se hizo del coloso multimodal American Port Services.

Sin embargo, el surgimiento de estas enormes empresas logísticas ha sido acompañado por una notable bonanza entre las pequeñas y medianas que han optado por especializarse e integrarse a redes de operadores complementarios.

Además de conocer al dedillo el área geográfica que cubren, incluyendo cómo minimizar el paso por vías congestionadas, estos operadores de nicho conocen en detalle los marcos regulatorios de sus sectores y cuentan con la infraestructura apropiada para el manejo y almacenamiento del tipo de carga con que trabajan.

En algunos casos cuentan también con equipamiento (y con los permisos oficiales pertinentes) que les permite suministrar servicios de valor agregado a sus clientes, incluyendo modificaciones o reembalajes de sus productos.

Lo que ocurre es que incluso operadores logísticos de gran tamaño e infraestructura tienden a encontrarse con que, dada la variedad y la complejidad de los requerimientos logísticos que se les plantean, son incapaces de ofrecer soluciones eficientes por sí solos.

Por esto, para competir por contratos de alcance global, y de gran complejidad y envergadura, están creando redes de operadores logísticos prestigiosos de todos los tamaños y especialidades y capaces de cubrir todos los espacios geográficos relevantes.

De este modo, cuando surge una licitación son capaces de preparar una propuesta y competir conformando un consorcio con las empresas adecuadas dentro de esta red, reservándose para ellos las tareas que están en condiciones de cumplir y asumiendo además el rol coordinador como lead logistics providers (LLPs).

Las condiciones que les proponen los LLPs a los operadores de nicho suelen ser atractivas, pero sólo para aquéllos que son suficientemente eficientes y experimentados como para atreverse a firmar contratos altamente exigentes y que incluyen cláusulas compensatorias severas en caso de incumplimiento.

También han surgido los llamados fourth-party logistics providers (4PLs), que son especialistas logísticos que carecen de infraestructura propia, pero que han identificado y reclutado para sus redes a 3PLs confiables y competitivos en sus respectivas especialidades geográficas y sectoriales.

Al igual que los LLPs, los 4PLs han diseñado sistemas de monitoreo y control así como fórmulas contractuales adecuadas, que les permiten formar consorcios logísticos globales a la medida de las necesidades de cada multinacional.

Al no estar en competencia con los 3PLs, los 4PLs tienen menos conflictos de interés que los LLPs. Sin embargo, estos últimos tienen la ventaja de la credibilidad que les da su larga trayectoria y su experiencia práctica.

Desde el punto de vista de las multinacionales, trabajar uno a uno con pequeños y medianos operadores logísticos especializados tiende a ser excesivamente complejo desde el punto de vista de la administración y el control.

Pero, si la mayor parte de estas funciones son traspasadas a un 4PL o un LLP, funcionar con este tipo de empresas les resulta atractivo puesto que pueden acceder con facilidad a su alta gerencia y lograr que estas empresas se focalicen en la resolución de los problemas que les surgen.

Esto es algo que les resulta bastante más difícil de lograr con ejecutivos de empresas logísticas de las grandes ligas, para los cuales la cuenta de esa multinacional en particular no representa una parte tan importante de su negocio.

En Chile, la tendencia a la especialización de los operadores logísticos está también cobrando fuerza, como lo demuestra el exitoso desarrollo de Giorgio Gori en la logística del vino y los licores; de Air Facility- AF Logistics en la logística de los alimentos y las ferias internacionales; y de Sociedad Coordinadora Logística Ltda. en la operación de contenedores. Sobre estas experiencias vale la pena leer las entrevistas y la nota que siguen a continuación.

Christian Figueroa, Director General.

Eduardo Ocaranza, Gerente General.

Rick Kohn, Gerente de Negocios Internacionales.

¿Cuáles fueron los principales hitos alcanzados durante el 2007?
R. Kohn: Luego de un 2006 intenso en términos de actividades para dar a conocer nuestro servicio en el mercado, las distintas organizaciones nos invitaron a participar como proveedor logístico en distintas ferias alrededor del mundo. Nuestro primer acercamiento importante este año fue "London Internacional Wine&Spirits Fair", importante feria desarrollada en Inglaterra, donde movimos carga expresa de vinos, tanto para expositores chilenos como para empresas argentinas, brasileras y uruguayas. Luego, participamos también en "VINEXPO" en Bordeaux, Francia.

¿Cómo evalúan el resultado de su participación?
R. Kohn: Fue muy exitoso. En ambas ocasiones, trabajamos con empresas y asociaciones tan importantes en el mercado chileno como son Concha y Toro, Valdivieso y Wines of Chile, entre otras. Asimismo, participamos como proveedor logístico de ProChile para la feria "Muestra y Cata", que se desarrolló en Asia y luego en Río de Janeiro, Sao Paulo, Bogotá y Caracas. Los buenos resultados obtenidos nos han permitido robustecer nuestra oferta, y buscar clientes fuera de las fronteras del país, además de potenciar nuevas áreas de negocios.

¿Cuáles de ellas destacaría?
R. Kohn: El servicio de carga expresa con Temperatura Controlada para todo tipo de muestras de productos congelados. Gracias a nuestra infraestructura, know how y red de agentes en el exterior, estamos en condiciones de ofrecer al mercado un servicio de courier integral, capaz de llevar una carga puerta a puerta a cualquier parte del mundo, incluso a lugares recónditos.

E. Ocaranza: Durante el último tiempo, se ha vuelto relevante el negocio relacionado con las casillas postales, lo que hemos comprobado a través del aumento de la carga manejada en nuestra oficina operativa en Miami, desde donde se distribuye a todos los países de Latinoamérica y donde también efectuamos logística de bodegaje y redespacho a Chile de productos stockeados.

¿Qué ventajas representa para el mercado este servicio?
E. Ocaranza: La ventaja es comprar en Estados Unidos, por ejemplo, aprovechando la baja del dólar, y contar con un servicio que asegura la recepción, despacho y entrega en el domicilio del abonado. De esta manera, las empresas que requieren para sus maquinarias repuestos urgentes, al utilizar nuestro servicio se saltan al antiguo intermediario en la compra, con la conveniencia de comprar en forma directa. Para este servicio, ponemos a disposición del mercado distintas alternativas de despacho, las que incluyen el transporte urgente por courier, carga aérea o marítima.

Una flota de camiones propios y externos le permite cumplir con los plazos de despacho y entrega prometidos, abarcando la zona central del país entre La Serena (IV Región) y Talca (VII Región).

Pablo Lavín, Gerente Comercial de la empresa, señala que "Coordinadora Logística está conformada por personal con años de experiencia en compañías líderes del sector logístico, ventaja que se traduce en poder brindar un servicio de transporte especializado de carga de contenedores en modalidad terrestre, en el cual asumimos la responsabilidad desde que la carga sale hasta que llega a destino, así como la coordinación con los distintos entes involucrados en puerto y la comunicación con el personal de bodega del cliente".

Por otra parte, el ejecutivo destaca que "nuestros customer services están en forma permanente con comunicación, permitiendo al cliente dejar en nuestras manos la operación y gestión de sus exportaciones e importaciones, cumpliendo con altos estándares en los tiempos de entrega".

Respecto de la diferencia que marcan con respecto a las grandes empresas, Lavín señala que "brindamos un servicio personalizado, quedando la relación empresa-cliente en manos de una sola persona, desde la solicitud del servicio a la emisión de la factura, entrega de número de contenedores y sellos, coordinación con agentes de aduanas, compañías navieras y otros entes involucrados".

¿Qué ventajas tiene para los clientes el modelo de logística de nicho?
F. Herrera: La ventaja de un importador o exportador de vinos y licores que opera con Gori, en Chile o en cualquier parte del mundo, es que está trabajando con un operador logístico que entrega un servicio integral de logística internacional, desde la bodega hasta el distribuidor. Con el tiempo nos hemos perfeccionando en estas tareas y ampliado nuestro conocimiento de este negocio. Conocemos el negocio de las viñas, tanto Pymes como grandes empresas, y el de los importadores y distribuidores, es decir, conocemos la cadena completa.

I. Espinoza: Específicamente, la ventaja para las viñas es trabajar con un operador que maneja grandes volúmenes de exportación y la cadena completa. Como operadores logísticos internacionales expertos en vinos y licores, sabemos cuáles son las dificultades que puede tener un exportador y de qué manera hacerles frente, así como manejar aspectos críticos relacionados con el cuidado del vino durante las distintas etapas de su logística de exportación. En definitiva, le damos a nuestro cliente la certeza de que su carga de vinos y licores llegará al distribuidor en las mismas condiciones en las que partió. Y esa es una gran garantía.

¿Por qué el vino requiere un tratamiento especial?
I. Espinoza: Porque la industria del vino, así como todas, tiene sus particularidades y requiere ser atendida por empresas que manejen esas variables. Una de ellas es que el vino se vende FOB y contra pedido, lo que significa que se trabaja contra el tiempo, desde que se recibe la orden hasta que se embarca. El operador que conoce este negocio ya está preparado para recibir una sobrecarga los días de cierre de stacking, debe tener los centros de consolidación habilitados, un transporte terrestre fluido y un agente de aduana muy ágil.

¿También por el tema del aseguramiento de la calidad?
F. Herrera: Efectivamente. El vino es un producto vivo, que reacciona ante cambios bruscos de temperatura. Además, es un producto frágil y pesado, por lo tanto cualquier error en la manipulación puede provocar el quiebre de botellas, con el consiguiente riesgo de estropear las etiquetas de una carga completa. Gracias a nuestra experiencia, si un exportador quiere trabajar su embarque con nosotros a cualquier parte del mundo, sabemos que a ciertos destinos la carga puede ir seca, y a otros, en cambio, requiere ir insulada o incluso refrigerada para proteger el contenido.

¿Cuál es el sello que caracteriza el servicio de Gori?
I. Espinoza: La búsqueda de relaciones estrechas y de largo plazo con todos los actores de la cadena; lo que quiere decir que trabajamos para ser un socio estratégico de las navieras, de los importadores y de los exportadores. Definitivamente, nuestro sello es que ante todo privilegiamos el servicio. En Gori no buscamos la rentabilidad como único fin, sino que pretendemos que ésta sea el resultado del buen servicio que entregamos a nuestros clientes.