Producto de su sostenido crecimiento, especialmente en el área automotriz y de herramientas eléctricas, las bodegas de Emasa comenzaron a hacerse pequeñas. Eso obligó a la compañía a contratar más espacios para el almacenamiento de sus productos, haciendo complejo su manejo y administración. Esta situación motivó a la empresa a apurar la construcción de su gran centro de distribución, el que comenzó a operar el 25 de Mayo recién pasado. Se trata de una superficie de 30.000 mt² emplazado en la comuna de Maipú, que desde su diseño y proyección, definió como principio fundamental incorporar la tecnología más avanzada disponible para el control y manejo de bodega. Un cambio necesario Hasta hace poco la gestión de bodega de Emasa estaba soportada en sistemas antiguos y respaldada en archivos físicos. Se hizo necesario, para seguir creciendo, cambiar el concepto de administración de bodega. Y la implementación de nueva tecnología se volvió un imperativo para la empresa. "Fue así como pensamos en implementar un sistema WMS. Llamamos a distintos proveedores, pero finalmente nos decidimos por trabajar con una empresa nacional por todas las ventajas que eso implicaba, especialmente en términos de cercanía. En este sentido, Binaria nos dio confianza, tanto por su trayectoria como por el nivel de profesionalismo de sus ejecutivos. De hecho, nuestra convicción fue tan clara al respecto, que después de conversar con ellos y llegar a un acuerdo, estuvimos seguros de que de esta unión nacería algo bueno", explica Luis Mella, Gerente de Informática de Emasa. Una de las grandes exigencias del proyecto era estandarizar los códigos de barras de todos los productos que distribuye la compañía; un desafío importante, especialmente teniendo en cuenta que Emasa trabaja con distintos representados. El tema se resolvió después de una compleja, pero exitosa sincronización con los proveedores, lo que le ha aportado al sistema gran agilidad y precisión. "Asimismo, implementamos un sistema de radiofrecuencia, también provisto por Binaria, y actualmente todos los operarios que trabajan en el centro de distribución utilizan terminales RFID, lo que implica que los errores sean prácticamente cero, porque todo está automatizado y en línea", recalca el ejecutivo de Emasa. WMS con sello personal Las expectativas planteadas por Emasa, al proyectar el WMS para su bodega, eran altas. "Queríamos un sistema que se adaptara 100% a nuestras necesidades, abarcando las operaciones más importantes y relevantes de la empresa. Por ejemplo, nuestro proceso de distribución de baterías tiene muchas particularidades y el sistema logró ajustarse perfectamente a cada una de sus características", explica el Gerente de Informática de Emasa. Y es que, definitivamente, la compañía no andaba en busca de un WMS estándar. "Su diseño debía estar en sintonía con lo que queríamos como empresa y ese fue el punto de partida para comenzar a trabajar en equipo. Aprovechamos nuestra experiencia -porque todos nuestros software los desarrollamos internamente- y el conocimiento de Binaria, de manera de dar vida a un WMS único", afirma Luis Mella. El sistema se llama WMSTEK en términos formales para Binaria, y en Emasa lo han denominado MAB. Ya está operativo y en el nuevo centro de distribución de la empresa el aprendizaje del sistema ha alcanzado un importante punto de maduración, tanto, que Luis Mella asegura que en Agosto de este año habrá muchos avances respecto del performance del sistema. Como afirma el ejecutivo de Emasa, "a nivel de tecnología creo que elegimos muy bien, porque hemos tenido muy buenos resultados hasta este momento. Y a nivel de proveedor, también. Binaria ha sido un soporte más allá de lo que esperábamos. En conjunto dimos vida a un software con muchas potencialidades y ventajas. Binaria hizo nacer este nuevo software en Emasa y creo que hemos sido muy buenos partners en este proceso de gestación". |