El crecimiento del mercado exportador y el auge de la producción de alimentos congelados fue uno de los motores que impulsó a un grupo de inversionistas a crear Austral Freezer. En diciembre pasado, comenzó la construcción y puesta en marcha de una iniciativa innovadora, que apuesta a entregar más que sólo frío. Como explica Agustín Palma, Gerente de Administración y Operaciones de la empresa, "se trata de brindar un servicio completo, que asegure una óptima conservación del producto bajo condiciones de frío extremo, complementado con sistemas de información capaces de proporcionar gran cantidad de datos relacionados con la carga congelada. Temperatura, ubicación y peso en forma histórica son algunas de las características de trazabilidad que contempla el servicio de Austral Freezer". El objetivo es, a su juicio, "llenar el espacio vacío dejado por muchos frigoríficos, que sólo se dedican a proveer refrigeración. Hoy, más que nunca, los mercados internacionales requieren de información. Y son justamente los productos con más datos de trazabilidad los que consiguen transarse a mejores precios, alcanzando paralelamente mayores índices de confiabilidad en los mercados de destino". Sólida infraestructura Las instalaciones de Austral Freezer -aún en proceso de construcción- son imponentes. La construcción consta de numerosas oficinas de administración, oficinas para clientes, extensas zonas de despacho y recepción de mercaderías, siete cámaras de frío y 13 andenes de carga y descarga de camiones. Su capacidad instalada supera las siete mil toneladas, acorde con las prestaciones de un frigorífico de tamaño mediano, con acento en las tecnologías de información como uno de sus principales valores agregados. Le seguirán, según el plan de negocios trazado, varios frigoríficos más, todos ubicados en zonas estratégicas de Santiago y Chile y orientados a entregar servicios de frío y trazabilidad de la carga a empresas comercializadoras y productoras de carnes rojas, carnes blancas y, en general, productos que requieran de frío. Como señala Agustín Palma, uno de los pilares de su negocio es la solidez de la estructura de las estanterías autoportantes. Por eso, la elección del proveedor fue un asunto complejo, delicado y en el que se invirtieron muchas horas de trabajo. Finalmente, Austral Freezer decidió adjudicar la construcción de la estantería a Acero Rack, principalmente por la garantía del proveedor respecto a la calidad de la construcción y al cumplimiento de los plazos de entrega, junto con una oferta económica muy ventajosa. Y fueron esas tres variables, según el ejecutivo de Austral Freezer, las que convirtieron la propuesta de Acero Rack en una alternativa insuperable. Plazos de entrega, una prueba superada Además de la calidad del acero, de la rigurosidad del diseño y desarrollo y de la precisión del armado en terreno, los plazos de entrega eran una variable crítica para Austral Freezer. Sin duda, a juicio de Agustín Palma, "cualquier atraso ponía en juego el comienzo de las operaciones en el plazo inicial fijado; un lujo que no estábamos dispuestos a permitirnos". Fue, ante todo, la gran condición del cliente a su proveedor. "Fue crítico en todo momento, porque de atrasarse la instalación de la estanterías autoportantes, se posponía también la de las cámaras de frío y, como consecuencia de eso, la puesta en marcha de nuestro negocio. Afortunadamente, los plazos se cumplieron satisfactoriamente y hoy tenemos cuatro cámaras de frío terminadas y completamente operativas en lo que a rack autoportante se refiere". En paralelo, Acero Rack continúa con la instalación de la estantería para las tres cámaras de frío restantes, lo que asegura a Austral Freezer comenzar a operar el día planificado, con una infraestructura física a toda prueba. |