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Luego de las Fiestas Patrias de 2018 se pudo constatar que el 94% de los accidentes fatales de tránsito que se registraron durante los cincos días de festejos tuvo relación con la falta de cultura vial, según se desprende del recuento que realizó la Zona de Tránsito, Carreteras y Seguridad Vial de Carabineros.
Fue así como el 36% de los accidentes involucró faltas cometidas por los peatones, como cruzar por un camino o carretera sin precaución o por fuera de pasos de cebra; mientras que el 58% de éstos fueron originados por conductores, entre otras razones, por manejar cansados o con sueño, en estado de ebriedad, pasar con luz roja o conducir en sentido contrario al tránsito.
Ante este escenario, la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC A.G.) apoya la campaña #UN18seguro de CONASET y reitera una vez más la necesidad de que nuestro país cuente con una adecuada cultura vial, que comienza por instaurar la educación sobre la materia y las normas de tránsito vigentes en el país como asignatura obligatoria en los distintos niveles de la enseñanza escolar.
La asociación lleva casi una década impulsando un plan de Educación Vial, que incluye iniciativas como el portal educacionvial.cl, que desarrolló la empresa PROAUDIO, realizando olimpiadas sobre la materia para alumnos de los últimos años de enseñanza media, circuitos de conducción y juegos educativos orientados a concientizar a los futuros conductores, junto a Carabineros de Chile, en todo el territorio nacional.
“Para crear una adecuada cultura vial es necesario educar sistemáticamente durante toda la enseñanza escolar sobre la prevención y la importancia en el respeto de las normas de tránsito, y, de esta manera, lograr una real preocupación y comprensión por entender la finalidad que tienen las leyes y las consecuencias de no cumplirlas. Es fundamental formar conductores responsables y comprometidos con la seguridad vial”, dijo Gustavo Castellanos, secretario general de la ANAC.
Luego de que en 1970 Alemania tuviera la mayor cantidad de casos fatales en accidentes viales en su historia -con 21.332 fallecidos- decidió implementar un plan de seguridad vial que incluyó educación sobre este tema a nivel familiar, jardines infantiles, escuelas primarias, secundarias y de conducir.
El conjunto de medidas dio buenos resultados con respecto a la prevención de accidentes: desde 1972, la cantidad de habitantes aumentó de 60 a 82 millones y el parque automotriz subió de 13 a 41 millones, mientras que la cifra de vehículos pesados se incrementó de 6 a 9 millones. En este mismo periodo, la cantidad de muertos por accidentes de tránsito se redujo de 21.332 a 7.792.
En ese país la educación vial es obligatoria para el periodo de 7 a 14 años con alrededor de 110 horas de cursos. Por su parte, los profesores reciben una formación específica complementaria y además diferentes organizaciones y asociaciones distribuyen material didáctico de apoyo.
Las escuelas austriacas también imparten educación para la seguridad vial de forma obligatoria, así́ como una serie de ejercicios prácticos en situaciones de tráfico real. Entre los 6 y los 10 años se imparten 10 módulos anuales de una hora. De forma complementaria, en los niveles de 1º a 3º se efectúan ejercicios prácticos sobre la realidad del tráfico con la colaboración de la policía.
Entre los 5 y los 10 años, los niños se preparan para dar un examen para conducir bicicletas, y en secundaria cuentan con una formación teórica y práctica para el manejo de motos.
En Francia, la enseñanza de esta materia también debe integrarse obligatoriamente en todo el ciclo escolar. Desde 1993 es obligatorio obtener en los colegios el Certificado Escolar de Seguridad Vial de Primer Nivel entre los 12 y 13 años y que es necesario para obtener el carnet de conducir de motos.
Luego deben aprobar el Certificado Escolar de Seguridad Vial de Segundo Nivel, entre los 14 y 15 años para conseguir la licencia de conducir.
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