Al menos 20 personas fallecieron ayer miércoles tras la explosión en una fábrica de fuegos artificiales en el estado de Punjab, en el norte de la India.
"Es probable que el origen de la explosión se deba a un fuego accidental, debido al material explosivo con el que están hechos los fuegos de artificio", explicó a Efe el inspector general de Policía del distrito de Gurdaspur, Surinderpal Singh Parmar.
La operación de rescate continúa, con efectivos de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF), así como miembros del equipo de respuesta a desastres regional, indicó Parmar, quien añadió que se desconoce el número exacto de heridos "porque han sido trasladados a diferentes hospitales, así que más tarde tendremos datos concretos".
Cabe señalar que el sábado pasado al menos siete personas murieron y más de 40 resultaron heridas tras varias explosiones dentro de una fábrica de químicos en el estado de Maharashtra, en el suroeste de India.
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