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La Amazonía peruana comenzó este año con un nuevo vertido de petróleo, producto de “una fuga menor” de crudo procedente del Oleoducto Nor Peruano (ONP), informó la empresa estatal Petroperú.
El derrame de crudo, cuya cantidad aún no se ha determinado, ocurrió el martes 1 de enero a la altura del kilómetro 323 del oleoducto, que se encuentra en la comunidad de Santa Rosa, ubicada en la región selvática de Loreto, la más grande de Perú.
La fuga ocurrió aparentemente tras una caída de la presión de una de las estaciones que almacenan el crudo y lo bombean por los distintos segmentos de la tubería.
La petrolera estatal investiga las causas de este incidente, que sucedió cuando el oleoducto estaba fuera de funcionamiento por una parada programada, y cuya reparación ya está en marcha por parte de un equipo enviado a la zona.
El caso es supervisado por el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) para concretar las causas, la responsabilidad de los hechos y el impacto generado, según indicó esta oficina en un comunicado.
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