Macarena Azú, Manager Page Personnel.

Bricsa celebra vacaciones de invierno con familias de sus colaboradores (30/07/2019) Más de la mitad de los trabajadores no logra desconectarse del trabajo durante sus vacaciones (06/02/2019) Bienestar de los empleados: Cómo la motivación puede mejorar la productividad (04/02/2019) 45% de los chilenos no logra desconectarse en vacaciones (23/01/2019)

El proyecto de ley que estipula el aumento de la cantidad de días de vacaciones, pone sobre la mesa la discusión respecto de la productividad laboral, pues este punto se plantea como una de sus ventajas. Entonces nos preguntamos, ¿es esto real? ¿Somos los chilenos más productivos cuando tenemos más vacaciones?, plantea Macarena Azú, Manager Page Personnel

“Chile es uno de los países de la OCDE que más horas trabaja al año y aun así genera una muy baja productividad, superando en Latinoamérica únicamente a México. En este sentido, me parece que el desafío país no pasa por el aumento de días de vacaciones, sino más bien por dos hitos importantes: la disminución de la jornada laboral y un cambio cultural orientado a una mentalidad de trabajo por objetivo”, señala la ejecutiva.

Actualmente nuestro país cuenta con 15 días legales de vacaciones y una jornada estándar de 45 horas semanales, a diferencia de Europa que cuentan con un mínimo de 20 o incluso 30 días de descanso, con jornadas laborales que no excedan las 40 horas a la semana. En países como Alemania, Holanda y Noruega la cantidad de horas trabajadas anuales no superan las 1400 horas, con un alto nivel de productividad anual, mientras que en México, Costa Rica y Chile, con un promedio de sobre las 2000 horas anuales, la productividad alcanza niveles bajos. Nuestro país, incluso, presenta uno de los índices más bajos de la región, posicionándonos quince puestos por debajo del promedio y muy por debajo de Estados Unidos que, según la OCDE, es el más productivo, resalta Macarena Azú.

Basados en lo anterior, continúa, Chile tiene mucho trabajo por delante en lo que respecta a la jornada laboral. “El primer desafío está en abandonar el presentismo acostumbrado y crear conciencia de productividad, tanto en las empresas como en los trabajadores. Es decir, tener jornadas de trabajo con menos duración, que permitan generar un impacto a nivel de calidad de vida de los colaboradores en todas sus esferas (ocio, salud, vida social, familiar, etc), pero también ellos deben ser capaces de priorizar sobre sus necesidades y compromisos, estableciendo sus propios tiempos. Hoy en día se tiende a confundir productividad con rapidez, sin embargo, la productividad está asociada a rendimiento y eficiencia, y aún estamos muy lejos de eso. Lo ideal sería que los trabajadores alcanzaran sus objetivos en menos tiempo, pero esto hay que hacerlo de modo eficiente”.

Volviendo al tema del proyecto de ley, este 2018 contaremos con 15 días feriados, es decir tendremos medio mes en que el país se paraliza dejando de generar los ingresos necesarios para la economía nacional, lo que afecta directamente al PIB. Es por esto, que el aumento de 15 a 20 días de vacaciones, por reemplazo de un solo festivo, sólo tendría sentido si “compensamos con el sacrificio” de tres o cuatro días feriados, asegura la experta en temas de reclutamiento.

“De aprobarse la ley con reemplazo de un solo día, la empresas deberán empezar desde ya a re organizarse frente a los periodos establecidos para estos fines, con el objetivo de no sufrir desestabilizaciones al interior de las compañías por falta de personal. Esto es una disposición legal corre para todos por igual, salvo para industrias como el retail, salud y manufactura, o trabajadores que tengan un contrato por obra o por algún período determinado”, concluye.