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Hong Kong informó su intención de reducir la importación de basura electrónica y regular su reciclaje con la introducción de estrictas medidas hacia finales de este año.
Esa región administrativa especial comenzará a entregar licencias, aprobará normas y aplicará controles rigurosos a las empresas dedicadas al negocio de comprar en el exterior desechos de equipos como televisores, impresoras y computadoras, entre otros.
Según sus autoridades, aquellas que incumplan con los estándares requeridos serán cerradas.
Actualmente, a los puertos de Hong Kong entran a diario toneladas de basura electrónica de países de Europa y Estados Unidos, mientras la ciudad produce al año 70 mil toneladas por sí sola.
A la mayoría se le extrae las partes de interés, se procesan y regresan al mercado internacional.
La medida servirá para controlar cientos de negocios ilegales dedicados a esa actividad, sin tomar precauciones para cuidar el medioambiente, en especial, evitar el derrame tóxico en el suelo y el agua.
Hong Kong sigue así los pasos del gobierno central de China, que desde este 1 de enero dejó de recibir los desechos plásticos y de papel de todo el mundo.
En consecuencia, este mes se han reportado grandes acumulaciones de ese tipo de basura en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Irlanda, Alemania y varios países europeos, indica Prensa Latina.
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