Alexander Ratinoff, Gerente de Administración y Finanzas de Improfor.

¿Cómo ha evolucionado la demanda por equipamiento médico de emergencia?
Las empresas están exigiendo estándares más altos de seguridad y, por ende, requiriendo una mayor cantidad de equipos médicos por número de trabajadores, lo que ha incrementado la demanda. En este contexto, nuestros clientes se encuentran principalmente en Bomberos, minería, industria productiva, entre otros sectores. Un 80% de nuestros productos se trae a pedido desde Estados Unidos, donde tenemos acuerdos con diversos distribuidores especializados, lo que nos permite tener un portafolio de aproximadamente 25 marcas.

¿Qué productos ofrecen?
Ofrecemos botiquines equipados para accidentes, como corta cinturones, tijeras de titanio, linternas pupilares, entre otros, los que pueden ser reutilizados, de manera que el cliente no tenga que estar reponiéndolos tras su uso. Todos los botiquines están diseñados con materiales de alta calidad, doble costura para soportar el peso, mientras que todos los insumos que los integran están aprobados por la FDA (Food and Drug Administration). Todos productos certificados. Asimismo, contamos con bolsos para trauma, fabricados en Cordura y equipados con más de 200 suministros de primeros auxilios. Estos elementos requieren de manipulación de un paramédico, ya que una persona sin conocimientos puede mal utilizar ciertos productos o no obtener su máximo provecho. Además, ofrecemos tablas espinales altamente resistentes, sistemas de sujeción rápida e inmovilizadores.

También ofrecen maniquies para capacitación…
Así es. Disponemos de una amplia gama de maniquies básicos, para anatomía, reanimación cardiopulmonar (RCP), entre otros. Si bien esta línea partió como una necesidad de Bomberos, hace tres años que se posiciona como la que más ha crecido en ventas. De hecho, la demandan mucho los Organismos Técnicos de Capacitación (OTEC), lo que nos permite vender entre 700 y 1.000 unidades al año. Vienen con certificación de fábrica, póliza de garantía, y se les exige que sean libres de látex para evitar alergias en las personas que los manipulan. Cuentan con sistemas desechables para realizar capacitación sin que exista contaminación cruzada en el muñeco.

¿Qué factores diferencian a Improfor?
Brindamos una solución completa al cliente. Además nuestros tiempos de respuesta -desde que se solicita un producto- no superan la hora para enviar la cotización y los 30 días para su entrega. Además, tenemos flexibilidad para traer cualquier producto que nos soliciten y a precios de distribuidor. Por último, brindamos capacitación cuando las empresas lo requieren. A partir de 2016, pretendemos crear una OTEC con código Sence para llevar a cabo entrenamientos en productos específicos que hoy no existen en Chile.