Rodrigo Allende.

De acuerdo al último Catastro Frutícola (Odepa y Ciren), publicado en julio pasado, realizado a la Región de Valparaíso, la superficie frutícola alcanza las 47.053 hectáreas. La producción informada entre las especies mayores y menores alcanza un total de 638.696 toneladas, las que son procesadas en 222 packings. De estos, 197 se encuentran en los mismos predios, mientras que 25 son extraprediales, involucrando ambos tipos una gran demanda de mano de obra temporal.

Las labores en packings, incluidas las que se llevan a cabo en cámaras de fumigación y frigoríficos, implican condiciones ambientales y de trabajo adversas para los trabajadores, tales como la exposición a ruido, bajas temperaturas, la exposición a humedad, la realización de esfuerzos físicos, la adopción y el mantenimiento por largas horas de posturas de pie, la realización de un trabajo manual de tipo repetitivo, atropellamiento por grúas horquillas que transitan al interior de los packings, y lo que resulta más grave, atrapamientos en las partes móviles de los equipos y maquinarias (como cadenas de transmisión, rodamientos, empaquetadoras de envases, equipos de vaciado y volteado de bines e hidrolavadoras).

El riesgo de atrapamiento constituye un importante factor de riesgo para la salud de las personas que trabajan en los packing. Esto no constituye un problema de frecuencia de accidentes, sino de gravedad de los mismos, dado que constituye un riesgo, tanto del punto de vista médico como legal, por los alcances de la Circular 2345. Otras importantes manifestaciones a nivel de la salud de las personas son las lesiones músculo-esqueléticas.

Por la importancia que esta actividad representa para el sector agrícola y agroindustrial y las medidas preventivas que exige y requiere, se indicarán una serie de recomendaciones generales para prevenir los riesgos asociados a esta actividad económica.

• Contar con un Programa de Prevención de Riesgos que considere el manejo de gases freón y/o amoniaco y gases fumigantes, elementos químicos para lavado y encerado de frutas e instalaciones, entre otras aplicaciones. Dicho programa debe ser auditado permanentemente por la máxima autoridad del packing para corregir las desviaciones.

• La construcción de los packings, así como de las cámaras de frío y de fumigación, deben contar con el apoyo ingenieril correspondiente, donde el trazado del layout tiene un papel primordial para las distintas actividades que se desarrollarán, como espacios de ingreso y salida de camiones; y para el movimiento de vehículos (como grúas horquilla y apiladores eléctricos) al interior del packing. Además, se deben implementar barandillas para evitar caídas de distinto nivel en pasillos entre líneas; iluminación superior a 150 lux (de acuerdo al D.S. 594 y considerar lo estipulado por el Reglamento Sanitario de los Alimentos; D. 977, art. 34 en relación a la iluminación en la inspección sanitaria); señalética indicadora de riesgos inherentes; paradas de emergencia en puntos de fácil acceso de los trabajadores; y sistemas de cierre de puertas al interior de cámaras frigoríficas, para evitar encerramientos accidentales.

• Los operadores de grúas horquilla deben contar con licencia Clase D y con un curso de prevención de riesgos en la conducción de estos equipos móviles.

• Entrenamiento permanente a los trabajadores en Autocuidado y Cuidado Mutuo.

• Las mantenciones y/o reparaciones deben estar perfectamente coordinadas entre las áreas de mantención y operaciones, para evitar accidentes graves por atrapamientos.

• El reclutamiento del personal debe ser preparado e inducido en las distintas actividades que se desarrollan al interior de los packings, considerando la capacitación permanente. Esto, por las complicaciones provocadas por la estacionalidad de otras actividades agrícolas.

• La línea de mando debe estar constituida por personal que tenga estudios específicos del ámbito agrícola y manejo de personas. Esto es importante por el grado de ascendencia que deben ejercer sobre sus dirigidos.

• El establecimiento de sistemas justos de pago, sean fijos o a tratos, es un factor contribuyente en el adecuado control de la situación de riesgo, por la motivación que les entrega la renta compensada.

• El cumplimiento de la normativa legal vigente en atención a la Ley Nº 16.774 y la Ley 20.001, es fundamental, por los alcances que tienen por ejemplo los comités paritarios, reglamento interno, información de riesgos laborales, pausas, etc., en el ámbito de la prevención de riesgos.

• La capacitación, entrenamiento y adiestramiento del personal es de suma importancia en este tipo de actividades, por lo que las empresas de este rubro deben crear los mecanismos necesarios para llevarlas a cabo.

• El uso de equipos de protección personal adecuados para ambientes con altos niveles de ruido, ropas de abrigo para trabajo en frío, ropa adecuada para trabajos en altas temperaturas (como en escaldados y calderas), etc. En el caso de los mantenimientos, la ropa debe ser ceñida al cuerpo (no suelta) para prevenir atrapamientos, etc.

• Es preferible que la empresa considere el mecanizado en el enzunchado de los pallets y de preferencia utilizar huinchas plásticas en vez de metálicas.

Estas medidas le ayudarán a mantener los riesgos bajo control. Sin duda, nuevas acciones tendientes a mejorar o reforzar las normativas siempre serán útiles.