Ganadores chilenos del Intel Global Challenge 2013 “En Chile se generan pocas soluciones tecnológicas en seguridad y salud laboral”

En octubre pasado, unos jóvenes profesionales de la Universidad de Chile obtuvieron el primer lugar en el Intel Global Challenge 2013, competencia de innovación que se desarrolló en Silicon Valley. Su “Mobile Monitoring Station” (Estación Móvil de Monitoreo), que venció a 18 mil proyectos de todo el mundo, permite medir las condiciones físicas de un operario y las de su ambiente, cuando se encuentra en faenas de alto riesgo. Para conocer más sobre el prototipo y su experiencia en el concurso, conversamos con Erik Atenas, Director de Tecnologías y Jorge Morales, Director Creativo, de Solunova.

Jorge Morales y Erik Atenas. ¿Cómo nació el Mobile Monitoring Station (MMS)? E. Atenas: Este proyecto no se nos ocurrió para este concurso, sino que nació en conjunto con la Universidad de Chile y Codelco Andina. En ese relacionamiento, se vio el problema de monitorear el material particulado en sus faenas con dispositivos que no fueran sensores fijos. Entonces, se concluyó crear un sensor móvil y fue ahí donde, junto a Mauricio Contreras (quien actualmente estudia en el extranjero), nos abocamos a su desarrollo, partiendo de los protocolos electrónicos y abordando la portabilidad de los aparatos. Cuando ya teníamos la plataforma operativa, decidimos incorporar sensores para conocer la situación física del operador, es decir, crear una estación de monitoreo que pudiera medir, a través de la piel, el ritmo cardíaco, la temperatura interna o el nivel de estrés, así como otras variables que planteamos en esta segunda etapa del proyecto, que presentamos en el Intel Global Challenge 2013. ¿Es común que se presenten proyectos de seguridad laboral en el concurso? J. Morales: La mayoría de los proyectos se relaciona con biotecnología o aplicaciones tecnológicas, pero las relacionadas con la seguridad laboral eran muy pocas, por no decir que éramos los únicos. Ya en competencia, obtuvimos muchos comentarios en distintas instancias de conversación con jurados, donde afianzamos el mensaje de que era un prototipo que podría utilizarse no solo en minería, sino que en cualquier industria que presentara riesgos y se necesitara una medición efectiva. Teníamos también cifras de la cantidad de trabajadores industriales y sobre las empresas que consideraban la seguridad laboral como primordial. Con esos antecedentes, más un proyecto innovador, obtuvimos buenos comentarios que finalmente se fueron reforzando hasta que obtuvimos el primer lugar. ¿Y los comentarios en Chile? E. Atenas: Una vez que ganamos, rápidamente nos empezaron a contactar de empresas, organismos estatales y medios de comunicación. Es decir, ha estado muy movido, incluso tuvimos una reunión con el Ministro de Minería. Los comentarios han sido positivos; todos quieren conocer el proyecto y su adaptabilidad a las necesidades de cada industria, principalmente en la minería. ¿En qué etapa se encuentra el proyecto? E. Atenas: Ahora estamos en la etapa de revisiones y análisis sobre un modelo final (o sus variantes en chaqueta, peto u otro soporte). Además, nos estamos enfocando en qué sensores son los más necesitados por la industria; generando protocolos de buen uso y evaluando la resistencia de los equipos y otros antecedentes que permitirán tener un servicio robusto. Esperamos que a mediados del próximo año esté listo para su producción industrial. ¿Qué importancia le entregan a generar innovaciones tecnológicas en seguridad y salud laboral? J. Morales: Aunque en nuestros inicios nuestra relación con la seguridad laboral era casi una coincidencia, hoy sabemos y creemos que es cada vez más necesario entregar soluciones definitivas en temas tan relevantes como la integridad de los trabajadores expuestos a ambientes hostiles. Por ejemplo, en minería se generan muchas soluciones tecnológicas para aumentar la producción y la calidad de la materia prima, pero pocas soluciones tecnológicas en seguridad y salud ocupacional. Creemos que la seguridad es un requerimiento cada vez mayor de las empresas, y las tecnologías de hoy están a disposición para generar las soluciones a estas necesidades. Entonces, ¿se debería fomentar soluciones tecnológicas en esta materia? E. Atenas: Efectivamente, la seguridad ocupacional está generando espacios para innovar. Las mismas empresas deben fomentar este tipo de iniciativas, las que deben abrirse a que desarrolladores puedan visitar las instalaciones, para que externos conozcan sus problemas; y una vez identificado hay que abordar la posible solución en conjunto con usuarios y comenzar a trabajar. Si no se cuenta con fondos, hoy existen variadas alternativas de fondos concursables esperando iniciativas. ¿Cómo opera este prototipo? Según Erik Atenas, si bien se ha presentado como una chaqueta, el soporte podría ser un peto de geólogo o una primera capa (u otro elemento de vestir) donde se aplican sensores, integrados de la manera menos perceptible posible, tanto en el uso como en el peso de la prenda. Estos sensores integrados transmiten los datos vía Bluetooth al smartphone del usuario. “Una vez que están los datos en el teléfono, se envían a la red y se suben a la nube, desde donde pueden ser vistos desde cualquier lugar, con la aplicación web del sistema. En esa instancia, los datos se muestran procesados con lo que se pueden tomar acciones preventivas”, finaliza el profesional.