El mundo está en constante transformación, y el cambio climático que estamos viviendo no es más que una evidencia de ello. A todos nos afecta esta realidad, por lo que debemos tener conciencia, hacerle frente e involucrar a todos los actores correspondientes. En ese escenario, la economía es un importante ámbito que ha debido adaptarse, lo mismo que el sector de la Construcción, ambos de una notable relevancia para la calidad de vida de las personas.

La construcción sustentable, innovadora y eficiente, ha ganado terreno en los países más desarrollados del mundo, y en Chile buscamos ir a la vanguardia en Latinoamérica, cuidando del planeta, a través de un modelo de negocio consciente de los impactos. Por esto, el Programa Estratégico Construye2025, impulsado por Transforma de Corfo, a través de distintas iniciativas, busca mejorar la productividad y sustentabilidad de la edificación a lo largo de todo su ciclo de vida. Así, cuenta con 16 iniciativas en pos de este desarrollo.

La “Gestión de Residuos de la Construcción” es una de las iniciativas de la Hoja de Ruta del Programa, en el marco de su Plan de Industrialización y Construcción Limpia. Cuenta con un Comité Gestor, integrado por actores públicos, privados y académicos. A través de él, se busca generar conciencia acerca de esta temática, no solo desde el punto de vista ambiental, sino también tomando en cuenta los tres pilares de la sustentabilidad: desarrollo económico, ambiental y social.

Bajo esta mirada, se entiende a los residuos como recursos y, por ende, como un indicador de la “eficiencia en los procesos productivos”. Un recurso que se pierde denota ineficiencia, y a la vez da cuenta de la necesidad de una mayor revisión del proceso productivo de la obra. Por esto, el comité busca aunar una clara visión entre los sectores públicos y privados, en relación a proyectos y estudios con acciones a implementar desde las distintas partes.

Una necesidad transversal en el sector, es la generación de información, tanto para nutrir las políticas públicas como para propiciar inversiones en la infraestructura faltante, motivando también la I+D+i, que impulse nuevas soluciones y que aporten a una construcción más sustentable. Es imprescindible entender el tema a través del concepto de economía circular, como una alternativa viable y atractiva para el desarrollo productivo, lo que también se traduce en nuevos desafíos para la innovación. Necesitamos saber qué se genera, cuánto y dónde, contar con indicadores que permitan analizar el impacto de las mejoras que se realizan, y valorar en las licitaciones públicas la gestión sustentable de los residuos, así como las mejoras en productividad.

A partir de eso, el comité encargó la realización de dos estudios para generar la información base del tema: el primero, para conocer cuáles son los residuos que se originan en la construcción y cuánto es lo que se produce; y con el segundo, se levanta un diagnóstico y un borrador de Acuerdo de Producción Limpia (APL).

Ahora bien, en ese primer estudio, un equipo del Centro de Investigación CITEC (Centro de Formación Tecnológica sobre Elementos y Componentes), de la Universidad del Bíobío, liderado por la Dra. Claudia Muñoz, desarrolló una metodología para la caracterización y cuantificación de residuos de la construcción, que se aplicó a dos obras de edificación habitacional en altura. A partir de este estudio, surgió como hallazgo importante la experiencia de la constructora Claro Vicuña Valenzuela (CVV), quien ha asumido la gestión de residuos como un desafío para optimizar recursos y, por tanto, mejorar su productividad.

El segundo estudio, a cargo de la CDT, corresponde a un diagnóstico sectorial sobre la gestión de residuos sólidos de las empresas del sector construcción (RM), el que identifica brechas y propone un Acuerdo de Producción Limpia (APL).

A partir de los estudios, de la experiencia de CVV, entre otras fuentes, podemos señalar que es importante que la construcción limpia se integre en su totalidad a los proyectos, idealmente desde el diseño. Así es como se capturan las mayores eficiencias.

Para lograr una buena gestión de residuos es relevante el convencimiento del capital humano, desde la alta dirección, transmitiéndose de capa en capa hacia todos los colaboradores, con directrices, roles y responsabilidades claras.

Entre los beneficios de la Gestión de Residuos, destacan: una construcción más limpia, mayor seguridad, menor impacto ambiental de la obra, y ahorros de al menos un 15% en el presupuesto para la disposición final de los residuos, entre otros.

El Programa Construye2025 es un actor clave en esta materia, capaz de articular a actores públicos, privados y de la academia, para consensuar un camino para mejorar la sustentabilidad de la construcción y reducir el impacto de la misma en el país. Chile puede mejorar entregando bienestar a las personas y al planeta, a través de una construcción más productiva y sustentable, y eso es tarea de todos.