¿Qué elementos debe considerar una respuesta apropiada ante incendios forestales?
Una respuesta apropiada frente al flagelo de los incendios rurales, debe partir necesariamente por la Prevención. Es por ello que, antes del comienzo de la temporada de incendios, trabajamos y fortalecimos cuatro grandes compromisos: el primero de ellos está relacionado con la silvicultura preventiva, especialmente en la interfaz urbanorural; luego, la implementación de una Red de Prevención Comunitaria, el aumento de la capacidad de respuesta al combate de incendios y la colaboración mutua con Bomberos de Chile, Conaf y empresas forestales, todo eso acompa- ñado de permanentes capacitaciones, reuniones de coordinación y relaciones con las comunidades.

En el ámbito específico del combate, la respuesta está respaldada por una detección oportuna de los incendios que afectan o amenazan el patrimonio y las comunidades vecinas, aspecto materializado a través de una red de torres de detección propias y de terceros. El despacho de recursos para atender la contingencia es realizado por medio de una moderna central de incendios apoyada por una unidad de pronósticos, simulación y análisis de los incendios que son atendidos.

El combate propiamente tal se ejecuta por una combinación de recursos aéreos y terrestres compuestos por 20 aeronaves y 38 brigadas. Entre las primeras, destacan 8 helicópteros medianos con capacidad de colocar 12 hombres en combate antes de 15 minutos; 9 aviones cisterna que pueden bombardear 3.000 litros de agua y/o productos químicos, y un helicóptero pesado modelo “Chinook” con un potencial de 10 toneladas de agua. En total, la capacidad de bombardeo diario de nuestra flota alcanza los 2 millones de litros.

El programa cuenta en total con más de 1.100 personas, compuesto por brigadistas, torreros, vigilantes, tripulaciones, choferes, manipuladores y personal de faenas, entre otros.

¿Qué elementos debe considerar una respuesta apropiada ante emergencias químicas?
Una efectiva respuesta ante emergencias químicas requiere considerar puntos tan importantes como: Coordinación, Prevención y Control.

Coordinación: siempre es necesario evaluar la necesidad de colaboración y cooperación de otras entidades (ya sean internas o externas a la organización) al enfrentar la respuesta a un incidente. Este objetivo es fundamental para lograr acuerdos de colaboración, permitir que los procesos sean multijerárquicos, alcanzar los objetivos de la coordinación y aumentar la difusión de la información.

Toda vez que nos preparamos para responder a una emergencia, logramos una respuesta efectiva, permitiéndonos controlar la situación de manera eficiente y, por consiguiente, reducir las consecuencias que, para el caso de la industria, normalmente son económicas.

Prevención: la prevención posibilitará el evitar un incidente antes de que ocurra y el actuar ante el incidente cuando hace su aparición, utilizando para ello los medios materiales y humanos precisos, con los objetivos de:

1. Salvaguardar la vida de los trabajadores y minimizar el impacto de las lesiones.

2. Proteger los activos de la organización.

3. Proteger el ambiente.

4. Evitar desencadenar riesgos mayores.

5. Garantizar la seguridad del personal que integra la Brigada de Emergencia.

6. Restablecer la normalidad lo más pronto posible.

7. Reducir el tiempo de reacción ante el evento.

8. Minimizar el impacto o consecuencias.

9. Racionalizar los recursos de respuesta.

10. Hacer ordenado y eficiente lo que sin un plan, sería arbitrario, caótico e ineficiente.


Control: se requiere el establecimiento de un sistema de mando y control que permita a la organización sostener el trabajo durante la emergencia. Este sistema debe ser escalable, flexible, apto y adaptable.