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Según la última edición del World Energy Outlook (WEO) de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), las energías renovables suministrarán casi la mitad del mix energético mundial en 2030, cuando, de acuerdo con el estudio, existirán casi 10 veces más vehículos eléctricos en las carreteras a nivel global, la energía solar fotovoltaica generará más electricidad que todo el sistema eléctrico de EEUU en la actualidad y las bombas de calor y otros sistemas de calefacción eléctrica superarán a las calderas de combustibles fósiles.
Si los países cumplen sus compromisos en materia de energía y clima, el progreso de las energías limpias sería aún más rápido. No obstante, seguirían siendo necesarias medidas aún más contundentes para mantener el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 °C.
“La transición hacia las energías limpias se está produciendo en todo el mundo y es imparable. No es una cuestión de ‘si’, sino de ‘cuándo’, y cuanto antes mejor para todos. Los gobiernos, las empresas y los inversores deben apoyar las transiciones hacia energías limpias en lugar de obstaculizarlas”, indicó Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE.
El WEO-2023 propone una estrategia global con miras a 2030 que consta de cinco pilares clave: triplicar la capacidad renovable mundial, duplicar el ritmo de mejora de la eficiencia energética, reducir en un 75% las emisiones de metano procedentes de la explotación de combustibles fósiles, establecer mecanismos de financiación innovadores y a gran escala para triplicar las inversiones en energías limpias en las economías emergentes y en desarrollo, y adoptar medidas para garantizar una disminución ordenada del uso de combustibles fósiles.
“Cada país debe encontrar su propio camino, pero la cooperación internacional es crucial para acelerar la transición hacia energías limpias. En particular, la velocidad a la que disminuyan las emisiones dependerá en gran medida de nuestra capacidad para financiar soluciones sostenibles que satisfagan la creciente demanda energética de las economías mundiales en rápido crecimiento. Todo esto apunta a la importancia vital de redoblar la colaboración y la cooperación, no de retroceder ante ellas”, agregó Birol.
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