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| Por Franco Bravo, Gerente Comercial del Segmento Industrial de Cocesa Prysmian Group. |
La seguridad es lo primero. La frase se usa repetidamente en distintos ámbitos de la vida y sobre todo del trabajo, donde las empresas se han preocupado de poner la seguridad de sus colaboradores como una de sus prioridades principales.
En el caso de la industria del cable, la seguridad también es lo primero y hoy ya no existen las excusas para que las instalaciones no sean de primer nivel.
Gran parte de los incendios se produce por instalaciones eléctricas defectuosas o sin mantenimiento, así que, en caso de emergencia, la calidad de los cables y su composición puede impactar gravemente en la cantidad de heridos e incluso de fallecidos.
A diferencia de los cables convencionales con cubiertas de PVC, los cables libres de halógenos (LSZH, por su sigla en inglés) no generan humos negros ni gases tóxicos, gracias a las características de su material aislante y de cubierta. Además, al ser la mayoría de ellos no propagantes de incendios, las flamas se auto-extinguen en un breve tiempo.
Por ejemplo, en caso de un incendio, los cables LSZH (Low-Smoke, Zero-Halogen) emiten una cantidad muy reducida de humos claros, lo que permite mantener la visibilidad para evacuar rápidamente a las personas afectadas y salvar vidas. Además, el poco humo que liberan no contiene sustancias tóxicas –como flúor, cloro, bromo o yodo–, evitando el efecto nocivo, incluso mortal, que pueden causar los gases ácidos que se desprenden de las chaquetas de PVC mientras se queman. A su vez, tampoco emiten ácido clorhídrico, que corroe los computadores y los equipos electrónicos.
Con esta innovación, los cables LSZH –como Eva-Plus o Evaflex, de Cocesa– cumplen con todos los requerimientos establecidos por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) para las instalaciones en lugares de reunión de personas. Estas exigencias se encuentran detalladas en el nuevo reglamento de instalaciones de consumo, RIC N° 04, que comenzó a regir en julio de 2022.
Hasta hace un tiempo, el precio podía ser un factor al momento de la elección de un conductor, pero hoy día ya no es lo más relevante porque sus costos son muy cercanos entre sí, considerando las opciones disponibles en el mercado. Lo principal es elegir un producto certificado por la SEC, de calidad y de una marca de confianza que entregue garantías de que el cable no tendrá inconvenientes en el tiempo y, por tanto, no genere accidentes ni gastos en cambios ni reparaciones.
Por otro lado, ¿los cables libres de halógenos sirven para usarse en instalaciones domiciliarias? Por supuesto. Y son ideales, porque en el hogar la seguridad también es lo primero.
Dado todo lo anterior, ¿hay razones para seguir usando cables con cubiertas de PVC? La respuesta es simple: no.
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