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La central de almacenamiento de energía con batería de flujo de 100 MW, ubicada en la ciudad de Dalian, en China, posee actualmente la mayor potencia y capacidad del mundo. Esta semana, dicha instalación se conectó a la red eléctrica del país asiático y estará totalmente operativa para mediados de octubre, con la meta de ampliar su capacidad a 200 MW.
Este ambicioso proyecto ya había sido aprobado por la Administración Nacional de Energía de China, en el año 2016.
La primera fase de esta central eléctrica en red es de 100 MW/400 MWh. En base el consumo medio de electricidad en la vida diaria de China, que es de 2 kWh per cápita, la central puede satisfacer la demanda diaria de electricidad de 200.000 residentes, reduciendo así la presión sobre el suministro eléctrico.
El proyecto utiliza la tecnología desarrollada por el Instituto de Física Química de Dalian (DICP). Una vez alcanzada su capacidad operativa, la central mejorará la conexión a la red de las energías renovables, equilibrará la estabilidad de la red eléctrica y mejorará la fiabilidad de la misma, sirviendo como modelo para la reducción de los picos de electricidad en China.
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