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Una importante noticia dio a conocer BHP en pos de la sustentabilidad de la industria minera nacional: la compañía australiana anunció la suscripción de cuatro acuerdos para alimentar de energía renovable todas sus operaciones en los minerales de Escondida y Spence, proceso que se completaría a mediados de la década entrante.
“Estos nuevos contratos de energía aumentarán la flexibilidad en nuestro portafolio y asegurarán el abastecimiento para nuestras operaciones, al tiempo que reducirán costos y desplazarán emisiones de CO2”, dijo Daniel Malchuk, Presidente de BHP Minerals Americas, en referencia a los contratos más grandes que haya suscrito en Chile un cliente no regulado.
Los contratos acordados por Escondida y Spence a través de un proceso de licitación son: 3 TWh/año adjudicado a ENEL Generación Chile por 15 años, y 3 TWh/año a Colbún por 10 años. Los contratos de ENEL comenzarán en agosto de 2021 y los de Colbún, en enero de 2022. Los nuevos contratos de energía renovable generarán valor positivo pese a la inversión de US$780 millones a efectos de cancelar los contratos existentes con centrales a carbón.
Malchuk aseguró que la decisión de abastecer de energía proveniente de fuentes renovables incidirá positivamente en los niveles de eficiencia de las operaciones en Chile y en una mayor valorización social. “Desde una perspectiva comercial, estos contratos permitirán una reducción estimada de un 20% en los precios de la energía en las operaciones de Escondida y Spence”, agregó.
“Este es un importante paso en nuestra transición hacia el uso de energía sustentable en el mediano plazo en Chile”, señaló el ejecutivo, quien recordó que la transición a fuentes renovables se inició esta década, cuando la central Kelar gasificó su proceso de generación. Se informó que estos acuerdos desplazarán unas 3 millones de toneladas de CO2 por año a partir de 2022, equivalente a las emisiones anuales de 700.000 automóviles con motor de combustión.
Asimismo, BHP trabaja paralelamente en eliminar la extracción de agua proveniente de acuíferos naturales al 2030. En Spence, una planta de desalinización de agua con una capacidad de 1.000 litros por segundo abastecerá a SGO (Spence Growth Option). La planta entrará en servicio en 2020. En Escondida, por su parte, una segunda planta desalinizadora comenzó a operar en 2017 con una capacidad máxima de 2.500 l/s. “Hemos invertido más de US$4.000 millones en instalaciones de desalinización en Escondida para avanzar en la eliminación de uso de agua subterránea en 2030”.
Mayor información en www.bhp.com
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