La leche es uno de los alimentos básicos más importantes, y se puede procesar en muchos productos diferentes como queso, yogurt, helado o leche en polvo. Un procesamiento confiable es esencial para obtener un producto final de alta calidad y garantizar la seguridad alimentaria de los productos.
En este ámbito, los sensores son un elemento clave y fundamental para procesos óptimos, por ejemplo, para separar, homogeneizar o pasteurizar la leche. Justamente para este sector, ifm destaca su línea de sensores que cumplen con las aprobaciones requeridas (EHEDG o 3A) y son resistentes a los procesos de limpieza CIP / SIP.
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