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El Gobierno de Venezuela dio inicio al plan de racionamiento eléctrico para enfrentar la severa sequía, consecuencia del fenómeno metereológico del Niño, con el objetivo principal de frenar el descenso de la capacidad del embalse Guri, uno de los más grandes del mundo y que proporciona alrededor del 60 por ciento del total de la demanda eléctrica del país.
Entre las medidas se incluye la restricción del servicio eléctrico durante un periodo de cuatro horas al día durante 40 días, lo que disminuirá el consumo de energía venezolano en 2.000 megavatios (MW). Sin embargo, este racionamiento no se aplicará en hospitales, aeropuertos, cuerpos de seguridad ni en la capital y otros cuatro estados (Vargas, Amazonas, Nueva Esparta y Delta Amacuro).
Cabe recordar que el Presidente venezolano, Nicolás Maduro, declaró no laborables los viernes de abril y mayo para así ahorrar energía, mientras que los centros comerciales del país deben “apagarse” entre las 13.00 y las 15.00 horas y las 19.00 y 21.00 horas desde el pasado mes de febrero.
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