Primar contaba con un sistema eléctrico de calefacción por convección y otro óleo hidráulico, que generaban un alto consumo eléctrico. "Teníamos calentadores de 1,7 kV. Nuestras oficinas operan hasta 16 horas diarias, por lo cual no podíamos mantenerlos funcionando todo ese tiempo, pues implicaba un gasto muy alto para la empresa", afirma el ejecutivo. Por esa razón, buscando las distintas alternativas disponibles en el mercado nacional, encontraron la oferta de Concables, consistente en un novedoso sistema de placas calefactoras que satisfizo sus requerimientos. "Descubrí este producto en Internet y me pareció muy interesante, porque incluía tablas y variables de medición de consumo, por lo que adquirimos 12 unidades", señala. A juicio del profesional, la ventaja de esta solución es que posee un bajo costo de inversión inicial y resulta más rentable que otros sistemas. "Estos calefactores sólo consumen 0,5 kV, lo que representa 3,5 veces menos en términos de consumo, por lo que pueden operar el doble de tiempo". Bajo costo operacional Estas placas calefactoras de bajo consumo eléctrico, fabricadas por las empresas israelíes AHT y Teldor, entregan tecnología de calefacción para uso domiciliario e industrial, pudiendo calefaccionar oficinas, instalaciones de faenas, baños, habitaciones, avícolas, criaderos de cerdos, entre otros. "En ambientes donde se necesita calefaccionar sobre ocho horas diarias, este sistema es muy conveniente y constituye un buen negocio. Además, otra ventaja importante es su bajo costo de instalación, ya que puede ser conectado por cualquier persona", sostiene Alfaro. Según los cálculos estimativos del ejecutivo, con la puesta en marcha de estos calefactores, la empresa debería generar un ahorro directo por costo operacional de entre 30% y 40% aproximadamente. "Un beneficio indiscutible de este sistema es que tiene un costo operacional menor que cualquier otro tipo de combustible, salvo la leña. Además, el costo inicial es bajísimo y poco traumático. Al hablar de otro tipo de instalaciones, la recuperación de la inversión es de entre cinco y ochos años, mientras que éste debería compensarse en un año y medio", sostiene. "Además, es mucho menos agresivo e invasivo, ya que no hay que modificar la infraestructura existente". Resalta también que los paneles son muy livianos, ocupan poco espacio y pueden ser utilizados incluso como ornamentos. "Existen alternativas decorativas para este sistema, ya que se les puede adosar revestimientos y figuras para ser empleados como pizarrones o cuadros". Simples y eficientes Flexibles y lavables, estos paneles calefactores de 0,5 cm de espesor temperan en sólo 20 minutos una habitación de hasta 9 m² (entrega un calor limpio no contaminante de hasta 70ºC), y pueden instalarse en pisos y muros, consumiendo apenas 0,5 kWh, siendo ideales para optimizar los espacios reducidos como kioscos, casetas de guardia y recepciones, entre otros. Están estructurados en el interior por una malla calefactora de metal amorfo y revestidos por una placa de fibra de vidrio. Cuentan con 15 años de garantía y vienen en una presentación de 100 x 44 cm, y 6 mm de espesor. "El producto incluye un kit de instalación muy sencillo, con espaciadores, tarugos y otros accesorios. Lo bueno es que incluye diferentes alternativas, ya sea para instalar en madera, tabiquería, cemento u otros", explica. "El nivel técnico que se requiere para colocar los paneles es prácticamente cero". Respecto al tema del servicio prestado por Concables, Alfaro resalta que en un inicio el proveedor generó una respuesta ágil y rápida, demostrando capacidad y profesionalismo en su trabajo. "Además fueron muy puntuales, porque nos entregaron los equipos en un plazo bastante breve, trayéndolos directamente desde Santiago", señala. Otro aspecto que resalta el ejecutivo de Primar, es que las placas requieren un bajísimo nivel de mantención, "ya que los únicos problemas posibles son fallas en los enchufes y termostatos, nada más. Es más; dan menos problemas que una lámpara de velador", concluye. |