La Escuela Militar es una de las instalaciones más atractivas y emblemáticas que tiene la ciudad de Santiago. Fundada el 16 de mayo de 1817, sus instalaciones, monumentos y patios interiores poseen una estética y diseño arquitectónico simple y austero, que requieren de luminarias ubicadas en lugares estratégicos para resaltar su belleza en la noche.

Fue esta condición la que motivó a Philips a participar en la licitación pública para iluminar el Instituto Matriz del Ejército de Chile, licitación que ganó la empresa con su línea de productos con tecnología LED, que poseen un bajo consumo de energía.

Rodrigo Rozas, Gerente de Ventas de Iluminación de Philips.

"Integramos toda la iluminación del edificio bajo este concepto, ya que gracias a nuestros servicios la Escuela Militar ahorrará cerca de un 50% en suministro eléctrico, porcentaje bastante importante porque hace que este proyecto no sólo sea atractivo para las personas, sino que también rentable económicamente en los tiempos de crisis de energía que estamos viviendo como país", afirma Rodrigo Rozas, Gerente de Ventas de Iluminación de Philips.

El ejecutivo agrega que las autoridades de la entidad estaban preocupadas por el tema de la eficiencia energética, "por eso querían una solución que embelleciera su patrimonio, pero que al mismo tiempo considerara este factor tan importante".

El proyecto

La iluminación de la fachada poniente del recinto contempló un baño de luz -rasante de emisión ascendente, con un equipo sobrepuesto de Ledline White BCS716- a las 16 columnas que componen este frontis. En tanto, a los machones laterales de la edificación se les aplicó un sistema BCS722 de color blanco.

Además, una línea de luz descendente fue utilizada en la cornisa superior con Leds Strings + Led Driver de 12 W. En la misma línea, y bajo igual sistema, los dos escudos recibieron un haz de luz abierto que resalta sus formas. Para el Patio de Honor se realizó un montaje a 20 metros de altura para que fuera iluminada desde la postación aérea con cuatro proyectores SLS 1500 W, instalados en las torres que posee el lugar.

Paulina Alamo, Arquitecto de Philips encargada del proyecto.

En el caso del Monumento a Bernardo O’Higgins, se utilizó una proyección de equipos embutidos en nichos del zócalo de la plataforma, lo que posibilitó su iluminación desde sus cuatro frentes. Por último, tanto la Capilla como el Torreón de Acceso, recibirán en algunas semanas sus respectivos baños de luz con LEDs de color ámbar y blanco.

"La iluminación con tecnología LED es una tendencia a nivel mundial que está orientada a no contaminar los cielos con deslumbramientos no deseados, ni con excesivos niveles de luz, sino más bien, a lograr una mirada más sensible de los edificios al destacar sus texturas y detalles", señala Paulina Alamo, Arquitecta de Philips encargada de la ejecución de los trabajos.

Al respecto, Rodrigo Rozas asegura que la elaboración de este proyecto que reemplazó a las antiguas lámparas halógenas, tiene "muy satisfechos a las autoridades militares, ya que nosotros entendimos la trascendencia que representa para ellos su patrimonio y pudimos destacarlo con nuestros productos que cumplen con las normas de eficiencia energética y que, además, son amistosos con el medioambiente".