Un claro indicador del crecimiento del mercado chileno de producción y reparación de electrónica es, sin duda, la cantidad de metros cuadrados de circuitos impresos que se fabrica en nuestro país. "Hace algunos años se fabricaban cerca de 50 metros cuadrados y hoy esa cifra ha crecido a 200", asegura Luis Lund, Gerente General de Poirot.

Pero, además, se deben considerar, a juicio de Jaime Soto, Gerente General de Electrónica Matharts, los diseños que se hacen en Chile y se fabrican en otros países. "En Chile se desarrollan prototipos, algunas unidades, las que después se producen alrededor del mundo en cantidades industriales", señala.

José Sepúlveda, Gerente División Protonic de Axys, indica que los dos últimos años han sido muy potentes en términos del desarrollo de este mercado. "Fácilmente, hemos quintuplicado la producción de circuitos impresos. Por otro lado, ya estamos participando en mercados internacionales y eso, sin lugar a dudas, habla de una industria madura", afirma.

Mercados en alza

Sistemas GPS para el control de flotas, sistemas GPRS para la transmisión inalámbrica de datos y sistemas de administración de la producción conforman el universo de la demanda que actualmente está predominando en la industria de la producción electrónica. Se trata, justamente, de industrias de nicho, no de volumen, en las cuales los proveedores han apostado por la especialización y el desarrollo de expertise en áreas específicas. El foco es, entonces, aplicaciones puntuales, para pequeños nichos de mercado.

En este sentido, Jorge Pontt, Director del Laboratorio de Confiabilidad y Calidad de Servicio Eléctrico (LACSE) de la Universidad Técnica Federico Santa María, señala que existen numerosas áreas del mercado con una demanda no satisfecha. Según el profesional, "entre ellas destaca el sector minero, que está buscando mejorar sus procesos y sistemas en forma permanente, muchas veces a través de la reparación de equipos complejos".

Asimismo, la reparación -por ejemplo en el mercado de celulares- crece sostenidamente, a pesar de que aún existen en Chile, según Oliver Ragu, Gerente de Administración y Finanzas de A Novo Andes, condiciones menos ventajosas que en países como China, especialmente en lo que a derechos aduaneros se refiere.

En términos de normativa, en Chile se fabrica y diseña electrónica siguiendo patrones mundiales, a pesar de que existe un amplio rango de normas. Entre ellas destacan los estándares IPC y normas macro como IEC, ANSI, EEE y NFPA, orientadas al diseño. En el área de manufactura, en tanto, se encuentra la normativa de compatibilidad electromágnética, la cual se está haciendo cada vez más conocida en el país.

En busca de profesionales creativos

Ingenieros electrónicos en ocasiones mal preparados, fundamentalmente formados para hacer mantenimiento, pero no para ser fabricantes ni empresarios. Ese es, en opinión de Pablo Moraga, Gerente General de Eko Maiko, el típico perfil de los ingenieros electrónicos. No son, a su juicio, profesionales con capacidad inventiva ni innovadora. "Ocurre que los ingenieros que salen de la universidad vienen con muchas herramientas técnicas, pero no las necesarias para hacer desarrollo o innovación en electrónica. Y lo que falta en Chile es formar profesionales con capacidad creativa", asegura.

Mucha teoría y poca práctica, a juicio de Oscar Campos, Gerente de Soporte Técnico de A Novo Andes. Un síntoma que, según Jaime Soto, se explica por la falta de incentivos que se generan dentro de las propias compañías en el mercado chileno. "En Chile, comúnmente todo lo que un ingeniero desarrolla pertenece a la empresa, mientras que en países como Estados Unidos, por ejemplo, la propiedad intelectual se comparte, lo que significa que reciben dividendos por ello, incluso si dejan de pertenecer a la compañía", comenta el Gerente General de Electrónica Matharts.

Es difícil, según los proveedores de este mercado, tener una masa crítica de profesionales creativos si en las universidades no se forman ingenieros con esa óptica. Pero, afortunadamente, según Cristian González, Gerente de Ventas de Victronics, las universidades se han dado cuenta de esta situación y están generando políticas de cambio, a través de reestructuraciones en las mallas curriculares.

A eso se suma, según Edwin Vallejos, Gerente General de Diva, a que en Chile es caro desarrollar productos. Para hacerlo, señala, es necesario importar los