| | Eduardo Bozzo, ABB | | | | Gustavo Valderrama, SCHNEIDER ELECTRIC | | | | Mauricio Rosales, ROLEC | | | | Claudio Palacios, ROCKWELL AUTOMATION | | | | Rodrigo Marchant, REXEL ELECTRA | | | | Luis Miranda, ABB | | | | Ricardo Silva, EATON | | | | Rodrigo Andías, PEIDE | | | | Luis Muñoz, WEG CHILE | | | | César Muñoz, TUNNING | | | Los Centros de Control de Motores, CCM, según la definición de los expertos, son sistemas que normalmente se utilizan para controlar distintas variables relacionadas con los motores que operan dentro de una planta. Respecto a su inteligencia, Eduardo Bozzo, Local BU Manager Low Voltage Products and Systems Automation Products Division de ABB, indica que comenzó a atribuírsele esa característica a aquellos sistemas capaces de transmitir ciertos estados de operación y señales, provenientes de los controladores de motores contenidos en un determinado tablero. Para Gustavo Valderrama, Gerente Técnico de Schneider Electric, los CCM han sido desde sus inicios muy valiosos desde el punto de vista de la concentración del comando de los motores. "Su principal ventaja consiste en que permiten proteger y controlar el motor al mismo tiempo, asegurando su adecuado desempeño", explica. Los CCM en el tiempo ¿Cuál es el origen del CCM? Según Mauricio Rosales, Product Manager de Centro de Control de Motores de Rolec, hasta antes de la existencia de estos sistemas, en una planta productiva existían numerosos motores de pequeña envergadura que requerían ser controlados. "Así fue como se optó por llevar todo el control y el comando eléctrico a través de sistemas centralizados", asegura el ejecutivo. A medida que ha pasado el tiempo, se ha introducido el concepto electrónico dentro de los CCM. De esta manera, como señala Gustavo Valderrama, los relés de sobrecarga son actualmente "la neurona, la parte inteligente del sistema, que permite comandar el partidor del motor, verificar sus parámetros y comunicaciones, el estado en el que se encuentra el equipo, entre otras variables". Antes, los CCM eran considerados una especie de "caja negra", de características fijas y al que hacerle cualquier tipo de modificación era caro, mientras que hoy, a juicio de Claudio Palacios, Product Control Package, Southern Cone, Area Manager de Rockwell Automation, "constituyen herramientas comunicables, parametrizables y monitoreables, porque su meta principal es mantener la planta operativa". Para Eduardo Bozzo, hay una clara evolución de los CCM. "La mediana y gran industria ya no concibe hacer una inversión en un CCM que no tenga al menos un nivel de inteligencia básico -como un protocolo de comunicación, por ejemplo- y por eso, los proveedores tecnológicos estamos apuntando al desafío de llevar el elemento de toma de decisiones al lado del motor, dentro de la gaveta modular del tablero, de manera que la decisión se tome cerca del elemento de control", asegura. Hoy en día, estos relés inteligentes tienen la capacidad de predecir algunos elementos, lo que le permite a los proveedores entregar al mercado lo que se conoce como disponibilidad de planta, que no es más que tener los recursos operativos la mayor cantidad de tiempo posible, de manera de lograr que su proceso sea eficiente. Esto ha hecho a los fabricantes e integradores adaptar sus sistemas a las distintas necesidades del mercado, diseñando soluciones específicas, dependiendo si se trata de una planta minera o de una alimenticia. Sistemas inteligentes Su capacidad de tomar decisiones, de predecir eventos y de medir distintas variables determina en gran medida el nivel de inteligencia de los CCM, presentes en el mercado en media y baja tensión. Según Rodrigo Marchant, Jefe Departamento Services de Rexel Electra, un CCM inteligente debe ser capaz de definir cuál es la variable que está causando problemas y contribuir así al correcto funcionamiento de los procesos. Como señala Luis Miranda, Product Support Automation Products Division de ABB, gracias a la inteligencia aplicada a los CCM aumentan los niveles de disponibilidad de la planta. Para Mauricio Rosales, en cambio, la evolución de los CCM ha sido importante, pero su inteligencia sigue siendo limitada. Esto, porque a juicio del profesional, "no toma decisiones, funciona bajo parámetros previamente definidos y realiza las operaciones que se determinan a través de sistemas superiores de control, como los DSS. Se llaman inteligentes porque tienen capacidades superiores que los CCM de antes, pero no porque tomen decisiones por sí solos". En este sentido, Ricardo Silva, Executive Sales Engineer de Eaton, asegura categóricamente que el Centro de Control de Motores Inteligente como tal no existe. Lo que sí está presente en la industria, explica, "son los CCM con diferentes y mayores grados de sofisticación tecnológica". Hay, de acuerdo a la opinión de Rodrigo Andías, Ingeniero de Proyectos Area Minera de Peide International, distintos tipos de sistemas. "Desde CCMs básicos, con relés de sobrecarga electromecánicos, a sistemas que incorporan gradualmente ciertos niveles de inteligencia, hasta llegar a los CCM con comunicación total", indica. Y es que, como señala Luis Muñoz, Gerente Area Energía y Proyectos de WEG Chile, no sólo la inteligencia es relevante. "Hay otros elementos que también son importantes, dependiendo de la aplicación que el cliente necesite, especialmente orientadas al mundo de la mediana empresa". |