A mi juicio, lo más importante es que las personas y empresas que participan en estas implementaciones tengan la capacidad real de hacerlo, aspecto que no se cumple en muchas ocasiones; por lo tanto, los sistemas no funcionan como se requiere. Pero, ¿quién garantiza que tendrá la capacidad?

Las personas que están en el negocio de los sistemas de control y automatización tienen variadas profesiones; en general se trata de técnicos e ingenieros de especialidades como eléctrica, electrónica, mecánica, química, informática, procesos, sistemas, entre otras, quienes en su desarrollo profesional han ido aprendiendo ciertas técnicas. Muchas veces, estos aprendizajes provienen de fuentes no muy idóneas e incluso sesgadas a un determinado esquema propuesto por los proveedores.

Quien realiza una instalación eléctrica de cualquier índole requiere estar inscrito como instalador autorizado en el SEC y realizar una declaración en conjunto con el propietario del inmueble ante esa entidad, ya que de lo contrario la compañía suministradora de energía eléctrica no está autorizada a conectarlo. ¿Por qué no sucede algo similar con una instalación de control? Después de todo, un control que no funcione adecuadamente puede producir enormes daños y no hay ninguna garantía que éstos hallan sido implementados por personas capacitadas.

¿Cómo lo hacen en otros países? En países más desarrollados, existen certificaciones dadas por organismos como ISA, asociaciones de integradores y las empresas proveedoras de las tecnologías. En Chile, sólo se ven algunos casos de certificación de las compañías proveedoras, pero normalmente los clientes no la exigen. Por ende, sólo es una garantía para la empresa proveedora, con el objeto que sus dispositivos funcionen correctamente y una mala instalación no repercuta en un desprestigio.

No estoy seguro si los clientes requerirán que en nuestro país exista un registro de integradores de sistemas de control certificados, de modo que al contratar tengan la seguridad de contar con profesionales realmente capacitados para implementar los controles en sus máquinas y procesos. A la fecha, esto no ha sido necesario.

Sin embargo, como profesional del área, creo indispensable que los sistemas que se implementen funcionen en forma óptima, y para eso, es necesario indudablemente que los sistemas sean proyectados, instalados y puestos en marcha por profesionales competentes.

La sección chilena de ISA, Instruments, Systems and Automation Society, quiere impulsar un sistema de certificación de personas y empresas y, con la colaboración de otras entidades, implementarlo, incluyendo un registro. Pero, no sacamos nada con hacer este costoso desarrollo, si en definitiva el mercado no lo requerirá. Por lo tanto, agradeceremos los comentarios, especialmente de los clientes que acostumbran a contratar estos servicios, sobre la real necesidad de certificar a los integradores. Detectada la necesidad, ISA pondrá su máximo esfuerzo en desarrollarlo.