El nuevo concepto tras el cual funciona la celda, desarrollado en una universidad, cuya iniciativa fue apoyada por Siemens, permite llevar a cabo un proceso de separación de materiales mucho más eficiente, recuperando el mineral más rápidamente; menor uso de espacio, y ahorro energético en su operación, de entre un 40% y 50%, con el consiguiente ahorro en costos.

Este ahorro energético se debe a que la nueva tecnología del fabricante de origen alemán se basa en el principio del rociado neumático con rotación de columnas, cuya pieza maestra es un jetstream de novedoso diseño que genera por sí mismo una turbulencia muy potente, haciendo innecesario el sistema de agitadores mecánicos típicos de las celdas convencionales. Además, las burbujas de gas a las que se adhieren las partículas de molibdeno son generadas inyectando nitrógeno a la pulpa de mineral en las cámaras mezcladoras.

Como explica Markus Vöge, "siempre hemos tenido una estrecha colaboración con Los Pelambres y por eso les propusimos hacer el proyecto piloto de la celda de flotación para uso industrial en la mina. Esta es la primera que instalamos a nivel mundial y desde el inicio de sus operaciones hace dos meses, ha dado muy buenos resultados".

Por su parte, Martín Nakouzi, quien estuvo a cargo de la implementación del proyecto, afirmó que "dada la excelente comunicación que tenemos con Los Pelambres, pudimos recibir de ellos la retroalimentación necesaria para saber qué era lo que realmente necesitaban y ahora los expertos en procesos aseguran que, aunque el rendimiento de la celda ya cumplió con las expectativas, puede ser aún mayor, y en eso estamos trabajando".

Beneficios para el medioambiente

Sumado al aumento en la productividad en la separación del mineral, la celda de flotación Siemens genera beneficios para el medioambiente, ya que además de reducir el consumo de energía -un bien escaso por estos días- permite obtener una concentración mayor del mineral, aumentándola en un 20%, dejando así menos residuos en el material que luego será descargado a los cauces naturales.

Con respecto a la problemática medioambiental que existe hoy en todo el mundo, Vöge señaló que Siemens está utilizando sus recursos de investigación y tecnología para generar propuestas que apunten en esta dirección. "Hoy en día hay regulaciones que obligan a las empresas a tener sistemas muy eficientes y que no sean contaminantes, y nosotros no hemos querido quedar fuera de esta discusión", sostuvo.

El profesional agregó que la empresa ofrece sistemas de acondicionamiento de agua -elemento crucial en la minería- que se adaptan al mix de sustancias tóxicas propias de la explotación a cielo abierto, las eliminan del ciclo hídrico y canalizan nuevamente el agua fresca hacia la producción. "Estamos desarrollando nuevas soluciones para tratamiento y desalinización de agua, que serán muy útiles, especialmente en países como Chile, cuyas faenas mineras están en zonas desérticas", indicó Vöge.

En tanto, Nakouzi explicó que en este momento Siemens está trabajando junto a Minera Los Pelambres en el desarrollo de una innovadora planta de tratamiento de agua para que mejore su calidad al momento de ser devuelta a los cauces naturales, pudiendo ser incluso utilizada en la agricultura. Este proyecto es pionero en Chile y pretende nuevamente hacer un aporte en ese sentido, ya que como indicó el ejecutivo, "Siemens se involucró en el desarrollo de este tipo de equipos por la importancia que tiene el agua a nivel ecológico, siendo además la razón para que se aventurara en una dirección que no es su nicho tradicional, la ingeniería eléctrica".

La compañía también vislumbra la oportunidad comercial que hay en todo sistema orientado a la eficiencia energética en industrias y tratamiento de agua, especialmente en la minería, ya que en palabras de Vöge, "una gestión bien pensada de los circuitos hídricos permite reducir buena parte de los gastos y repercute en la imagen pública de una empresa mineral".

Como uno de los proveedores líderes de la industria minera a nivel mundial, Siemens quiso también innovar en el último paso: el tratamiento y la reutilización del agua, área que tendrá mayor presencia en la división minera de la empresa y que será potenciada especialmente en países eminentemente mineros, como Chile.