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  REPORTAJE
Gestión de mantenimiento
Eliminando los paros de planta no deseados

Dedicarse a su negocio y a destinar todo el tiempo y conocimiento a las actividades básicas de cada empresa es una de las grandes virtudes de la tercerización. Específicamente, el outsourcing para la gestión de mantenimiento permite tener bajo control la plataforma de hardware y software que soportan los procesos y anticiparse a cualquier falla que pueda desencadenar la detención de producción. Y esas son algunas de las razones que explican por qué esta tendencia gana cada día más adeptos.

Romper los antiguos paradigmas al interior de las fábricas, según los cuales las unidades de mantenimiento e ingeniería debían ser gerenciadas por personal interno es lo que, a juicio de Antonio Valbuena, Gerente Comercial de CMS Performance Services, grafica lo que está ocurriendo hoy día con la tercerización de la gestión de mantenimiento productivo. "Producto de las presiones externas del mercado y la competencia cerrada, el outsourcing de servicios se está volviendo una necesidad, porque genera grandes fortalezas y ventajas competitivas", asegura.

En la actualidad, Fernando Saavedra, Service Manager de Rockwell Automation, señala que el mantenimiento ha adquirido una importancia relevante, debido principalmente a la evolución de los equipamientos, que han adquirido un mayor grado de dificultad. "Para cumplir con las demandantes metas de producción y comerciales, ya no se puede usar un método ‘receta’ para mantener los activos de producción. Es necesario contar con una estrategia de mantenimiento, que incluya un plan general que identifique problemas, necesidades y objetivos y que coordine cada función de la organización", explica.

Las actividades diarias de la gestión de mantenimiento son planificar, controlar, hacer seguimiento, organizar las actividades, medir y evaluar los indicadores. Muchas tareas que no siempre las empresas pueden cumplir autónomamente y que hacen necesario, en opinión de Andrés Farías, Gerente División Optimización de Activos de Ineco, recurrir a terceros especialistas capaces de lograr estos objetivos.

Para Patricio Juri, Gerente del Area de Mantenimiento de IMA Industrial, el valor de las empresas de servicios especializados en mantenimiento y su experiencia se capitaliza justamente en su know how, "el que finalmente se pone a disposición de los clientes, que concentran su tiempo en la gestión y optimización de los procesos productivos para obtener los máximos beneficios de sus negocios".


El mantenimiento industrial en Chile

Según Pablo Zanardo, Project Manager de Infor, en Chile el servicio de mantenimiento industrial está definido de distintas maneras según la industria. En el ámbito de la minería, como explica el ejecutivo, se encuentra ampliamente difundido, especialmente a través de provisión de mano de obra. En las industrias de proceso encuentra una difusión más puntual, orientada a equipos y servicios específicos y, por último, en el ámbito de los servicios, una gran presencia, a través de la tercerización orientada a objetivos y medida en SLA o Services Level Agreement.

En las empresas nacionales, cada día son más las empresas que están abiertas a contar con personal externo para realizar el mantenimiento de sus equipos de producción. Ya no sólo se busca, a juicio de Fernando Saavedra, el especialista al momento de una falla, sino que tener acuerdos en los que el proveedor se haga cargo del ciclo de vida del equipo, cumpliendo con el mantenimiento, el soporte en línea y el training, entre otras variables. "Y en Chile, los pioneros en estos acuerdos han sido las empresas que poseen procesos con un alto nivel tecnológico", puntualiza.

Antonio Valbuena, Gerente Comercial de CMS Performance Services.
de Arian.
Fernando Saavedra, Service Manager de Rockwell
Automation.
Andrés Farías, Gerente División Optimización de Activos de Ineco.
Patricio Juri, Gerente del Area de Mantenimiento de IMA Industrial.
Pablo Zanardo, Project Manager de Infor.

Las empresas que están adoptando este tipo de servicios son principalmente las que han entendido los conceptos de calidad, que tienen sistemas de gestión bien desarrollados, con procesos altamente tecnificados y que, como indica Andrés Farías, valoran el impacto del trabajo bien realizado. Según Antonio Valbuena, algunas plantas mineras están dando los primeros pasos en este sentido, "desarrollando un concepto de aliado estratégico de largo plazo, con el fin de tener un negocio más sustentable a través de servicios basados en desempeño. Esto les permitirá concentrarse en el corazón de su negocio y acceder a recursos, conocimientos y mejores prácticas que no tienen disponibles en su interior".

En industrias de proceso, a juicio de Pablo Zanardo, se busca principalmente el conocimiento técnico específico por un lado, y la liberación de tareas rutinarias sin valor agregado en el proceso principal.


Los grandes beneficios

La base del mantenimiento estratégico está en la capacidad de combinar de la mejor forma posible los métodos reactivos, preventivos y predictivos, aplicando óptimamente el equipo, el personal y los procesos correctos para maximizar el retorno de la inversión. Generalmente, como puntualiza Fernando Saavedra, "en las etapas iniciales del ciclo de vida de los equipos hay un mayor énfasis en la tecnología, mientras que en fases posteriores se pone más énfasis en las personas, los procesos y los servicios, para maximizar el retorno de la inversión".

El conocido dicho "pastelero a tus pasteles", según Andrés Farías, es el que mejor grafica los beneficios de dejar en manos de empresas especializadas la gestión del mantenimiento industrial. En términos de la cuantificación de beneficios, éstos son tangibles, en opinión del ejecutivo de Ineco, a través de indicadores generados para cada uno de las actividades que sean tercerizadas.

Actualmente, están a disposición de las empresas herramientas, sistemas y estándares de clase mundial, que permiten desarrollar la gestión completa de sus activos: Ingeniería, planificación, ejecución, control de inventarios, proyectos de mejora y gestión general de mantenimiento. Como señala Antonio Valbuena, "la administración adecuada de este tipo de herramientas implica la responsabilidad efectiva de costos de producción y mejoramiento del desempeño de los activos de la planta. El indicador de desempeño más importante es O.E.E (Overal Equipment Effectiveness), que en general considera tres variables: Disponibilidad, productividad y calidad".

Que cada empresa logre concentrarse en sus competencias medulares, reducción de costos, incorporación de recursos especializados, optimización de las organizaciones y visibilidad total del desempeño del tercero, entre otras, conforman el conjunto de ventajas que, para Patricio Juri, trae consigo la externalización de la gestión de mantenimiento. La cuantificación de los beneficios guarda relación con la medición de objetivos definidos para cada servicio, ya sea, la reducción del costo unitario de mantención por unidad producida, aumento de los ingresos por una mayor confiabilidad y disponibilidad de planta, reducción de inventario de repuestos u optimización de la vida útil de los activos.


Hacia el éxito en la gestión de mantenimiento

Muchas veces, no existe total conciencia respecto a que el mantenimiento es parte importante de la producción de la empresa. "La gestión diaria del mantenimiento es un proceso complejo, que involucra muchos actores y que debe tener como objetivo principal la menor ocurrencia de paros de planta no deseados", explica Andrés Farías.

Para asegurar el éxito en la gestión de mantenimiento, es necesaria la incorporación de los conceptos de ingeniería de mantenimiento desde el diseño del proyecto, para integrar los conceptos de confiabilidad, disponibilidad y mantenibilidad. El desarollo de la ingeniería de mantenimiento es imprescindible, como indica Patricio Juri, para determinar los recursos necesarios y las estrategias de mantenimiento más adecuadas. "Luego, es necesario implantar un medio informático especializado en mantenimiento, a lo menos, con los planes de mantenimiento preventivo, predictico, correctivo, recursos materiales, humanos, repuestos y procedimientos", señala.

Según el ejecutivo de IMA, es fundamental aplicar al máximo metodologías predictivas que eviten hacer "un sobre mantenimiento", metodologías de ingeniería de mantenimiento coordinadas con la administración del servicio tercerizado y, finalmente, coordinar un trabajo en equipo entre el mandante y la empresa de servicios.

El éxito de una estrategia de gestión de mantenimiento depende, también, de un profundo análisis de las necesidades de la empresa respecto de sus activos. En este sentido, es importante preguntarse qué función se requieren de los mismos, qué márgenes se manejan sobre esas funciones, qué consecuencias pueden acarrear posibles fallas y qué riesgos se está dispuesto como empresa a asumir.

Asimismo, a juicio de Pablo Zanardo, es fundamental conocer las características propias de los equipos -sus parámetros de funcionamiento, su curva de fallas y entorno operacional- y de las herramientas de mantenimiento disponibles. "Sin este análisis, la empresa se expone a una seguidilla de incidentes, sin llegar nunca a tener un control de los mismos".

Junio 2007
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