En la figura 1 podemos observar las distintas partes del relé y su funcionamiento básico. Al aplicar tensión en la bobina, ésta será recorrida por una corriente creando un flujo magnético. | Figura 1. | Este flujo se guiará a través del circuito magnético, apareciendo una fuerza que hará bascular la parte móvil de manera que se cierre el circuito, presentando de esta forma una menor resistencia al paso de las líneas de flujo. Esta situación se mantiene siempre que se cumpla la condición de existencia de tensión auxiliar, en nivel suficiente, en su circuito de mando (entrada). Cuando esta condición desaparece, el relé vuelve a su posición de reposo por medio de la actuación de algún dispositivo, como puede ser un resorte. Existe una analogía entre el circuito eléctrico y uno magnético. Según la Ley de ohm, en un circuito eléctrico tenemos: Mientras que en un circuito magnético, tenemos: La fuerza magneto-motriz la medimos en am-perivueltas (av = I x nº espiras). La reluctancia (Â) y, por lo tanto, el flujo (F) es distinta en las dos posiciones del relé auxiliar (distinta geometría del circuito magnético). En la posición de reposo, la  es mayor que en la posición de trabajo. | Figura 2. | La bobina de un relé se comporta como una resistencia y una autoinducción puras colocadas en serie, tal y como se muestra en la figura 2. Al aplicar una tensión en sus bornes, aparece una corriente sobre el circuito, la cual se tarda un tiempo en alcanzar su valor nominal por efecto de la autoinducción. También existe la inercia mecánica de todo el sistema móvil. Por lo tanto, podemos decir, que el cambio de estado no es instantáneo, sino que debido a los parámetros anteriormente expuestos el relé tarda un tiempo en cambiar de estado (del orden de 20 ms). A continuación, se muestra un relé electromagnético de corriente continua con todas las partes que forman parte del mismo. Como podemos observar en el esquema anterior, el relé se puede dividir en tres partes diferentes, aisladas galváni-camente entre sí: El Circuito Magnético, compuesto por el núcleo, la culata, la armadura y el entre-hierro. El Circuito de Entrada, compuesto exclusivamente por la bobina. El Circuito de Salida, compuesto por las láminas móviles, la trenza y los contactos. A estas partes, hay que añadir todo lo que es el soporte mecánico del relé, junto con el resorte antagonista que mantiene el relé en la posición de equilibrio cuando no existe señal de entrada. Funcionamiento La corriente, al pasar por la bobina, crea unas amperi-vueltas (av) en valor suficiente para vencer el par antagonista creado por el muelle, de manera que se consigue cerrar el circuito magnético, atrayendo la parte móvil de dicho circuito (armadura) hacia el núcleo. El contacto inversor, unido eléctricamente con la lámina móvil, se desconecta del contacto de reposo, conectándose seguidamente con el contacto de trabajo (conmuta). De este modo, se consigue aislar el circuito de mando del circuito de fuerza, así como multiplicar la señal (varios contactos de salida respecto de una sola orden de mando). Transcurre un tiempo entre que la bobina del relé recibe la señal de entrada hasta que se termina la conmutación, debido a la autoinducción de la bobina y la inercia del sistema móvil, como se indicó anteriormente. El entre-hierro tiene el objetivo de conseguir vencer el magnetismo remanente cuando desaparece la tensión en bornes de la bobina para facilitar el retorno de la parte móvil a su posición de reposo. Las laminas móviles, tanto en reposo como en trabajo, están flexadas y realizan una fuerza contra los contactos fijos. Esta fuerza, que llamamos presión, se mide durante el proceso de control y está relacionada con la resistencia eléctrica de los contactos: "Mayor presión, menor resistencia, mayor conductividad". |