Dada la lejanía del lugar y las condiciones naturales del entorno, Glamis Gold -que posee reservas del orden de 6,3 millones de onzas de oro y 38,5 millones de onzas de plata- decidió confiar el desarrollo y puesta en marcha de este singular y complicado proyecto a un contratista con amplia experiencia en el área de ingeniería y construcción como la trasnacional Aker Kvaer-ner. La firma, a través de su filial chilena que posee casi 40 años de presencia en el mercado local, llevó a cabo de manera íntegra las faenas de edificación y las pruebas correspondientes en nuestro país. Uno de los sistemas más importantes que debió ejecutar Aker Kvaerner Chile fue la puesta en marcha de la arquitectura completa de la red de supervisión y control, punto neurálgico de operación y producción de la mina, ya que la plataforma está encargada de establecer la comunicación desde todas las estaciones de trabajo hasta los servidores centrales. Para tal efecto, la compañía contrató a Tunning Ingeniería, SP de Rockwell Automation Chile, empresa que además de suministrar el software y hardware necesario se encargó de configurar, integrar y poner en marcha los dispositivos de supervisión y control. Calidad y respaldo internacional Para Benito Astudillo, Proyectista Senior de Aker Kvaerner, y uno de los principales gestores de la obra, "si bien se trataba de una planta relativamente pequeña, la obra constituyó un desafío interesante y complejo para todos los proveedores, ya que era altamente automatizada; incluso contaba con una gran diversidad de tableros de control, para lo cual se debieron utilizar muchos controladores". La cantidad final empleada fue de 14 tableros de control, 8 tableros de comunicaciones y 7 tableros de distribución. A su juicio, el objetivo primordial fue que la mina operase de manera completamente automática, de tal forma que el proceso de control tuviese el mínimo de injerencia humana, reduciendo el margen de error prácticamente a cero. Astudillo, quien estuvo a cargo de realizar la conexión de los diferentes equipos adquiridos, sostiene que la elección del proveedor se basó principalmente en la calidad y seguridad que ofrecían sus productos. "A nivel de ingeniería, Rockwell Automation es una empresa ampliamente conocida, que ofrece respaldo, calidad y garantía. Además, poseía una ventaja comparativa muy importante, ya que era capaz de satisfacer nuestros requerimientos tanto en Chile como en México". Ventajas de productos y servicios Para el profesional, el principal atributo de los controladores Allen-Bradley que comercializa Rockwell Automation es su facilidad de operación. "Este sistema posee un listado de uso preestablecido, lo cual permite a ingenieros y operarios conocer exactamente cómo operan", afirma Astudillo, agregando que "de esta forma resulta muy sencillo y rápido realizar los enlaces de conexión en los sistemas de control y supervisión". Más allá de algunas situaciones puntuales, el profesional sostiene que el servicio postventa y asistencia técnica ofrecida por Tunning Ingeniería fue bien calificado. "El personal técnico es muy profesional y ha sido capaz de resolver los distintos inconvenientes que se han presentado. Además, la asistencia que recibimos en terreno fue óptima". Otro aspecto valorable, según Astudillo, fue el hecho de que el proveedor entregó UPS y con-versores que no estaban incluidos en el proyecto original, "lo que demuestra una buena predisposición de su parte y un alto nivel de proactividad". Arquitectura del sistema Con más de 11 años de presencia en el mercado local, Tunning Ingeniería debió poner en operaciones la arquitectura del sistema, conformada por redes de supervisión, control y campo. Para ello, implementó una plataforma cliente-servidor utilizando una solución basada en la instalación del RSView SE Server en dos servidores centrales con configuración redundante (primario y secundario) y el RSBizware Historian Server en un servidor de base de datos. La combinación de ambos productos mejoró las prestaciones de las estaciones de trabajo, ya que al contar con el RSView Client y el RSBizware éstas podían conectarse de manera rápida y efectiva a los servidores, brindando una robusta interface de operación, monitoreo, análisis de tendencias y datos históricos de proceso, siendo esto último de especial relevancia para una mina que procesa oro. La red de control, conformada principalmente por controladores ControlLogix 5000, uno de ellos redundante y 11 racks I/O remotos para la red de campo, constituyó una plataforma flexible para la integración de E/S de instrumentación, señales eléctricas provenientes de CCM y controladores. Además, Tunning fue responsable de la configuración y programación de los equipos ControlLogix y de su integración con controladores de otros proveedores, de la supervisión del montaje, configuración de las redes de comunicación, puesta en marcha y capacitación. "Esta plataforma cumple una labor vital en la operación y la producción de la planta, ya que cualquier tipo de falla o detención, implica grandes pérdidas para la compañía", sostiene Alberto Serna, Ingeniero del Proyecto y Jefe de Calidad de Tunning Ingeniería. Serna explica que este proyecto se denomina "fast track", ya que el proceso de ingeniería se debe adecuar y evolucionar rápidamente de acuerdo al movimiento de información y en algunos casos, como la integración de equipos vendors, el proceso era concluido en la etapa de construcción. "Por lo tanto, los sistemas debían permitir modificaciones sin detención del proceso tanto en la etapa de construcción como en la de puesta en marcha y operación". |