¿Cuáles son las tendencias que observa en el mercado industrial?
P. Moragas: A nivel mundial, la tendencia es que el cliente requiere paquetes de integraciones más que comprar sólo un motor. Quiere una solución integral.

En ese sentido, BMV tiene diversas capacidades: Manufactura, que nos permite fabricar el equipamiento necesario; Ingeniería, orientada a integrar los diversos elementos del proyecto; Administración, para gestionar el proyecto del cliente; Representaciones, manejando importantes marcas extranjeras; Servicios, para atender las necesidades de imple-mentación, puesta en marcha y capacitación; y Construcción, para realizar las obras civiles del proyecto. En todas estas áreas contamos con personal e infraestructura especializada, siendo la unión de estas capacidades la ecuación que nos permite integrar un sistema y ser Proveedores de Soluciones.

¿Qué diferencia a BMV de su competencia?
E. Ballester: La seriedad y continuidad que nos da el hecho de tener una experiencia de 24 años integrando sistemas "a la medida" de los requerimientos del proyecto. Es importante señalar que más del 30% de nuestro staff está compuesto por ingenieros de diversas especialidades.

Además, somos integradores multi-marca, por lo que podemos elegir el mejor producto para cada necesidad o de la marca que prefiera el cliente. Esta flexibilidad nos diferencia claramente de los otros fabricantes, que están obligados a usar sus propios productos.

¿Cuáles son las ventajas de un proyecto de integración?
P. Moragas: Entre las ventajas que ofrece la integración, podemos mencionar que la responsabilidad queda en "una sola mano", es decir, el cliente no necesita coordinar el proyecto con diferentes empresas.

Lo anterior conlleva a una optimi-zación del proceso de compra, pues se requiere una sola orden para la totalidad del suministro.

Asimismo, al contar con un integrador único se elimina la compleja coordinación entre diferentes proveedores y, de este modo, los atrasos en la instalación.

Además, cuando se trata de grandes equipamientos (como salas eléctricas), la integración resulta en una instalación más fácil, ya que se requiere menos personal y tiempo, lo que es sumamente importante en implementaciones en sitios desérticos o a gran altura.

El equipo, resultado de la integración, requiere un tiempo mínimo de puesta en servicio porque cada conexionado y la operación de cada equipo han sido revisados y probados en fábrica.