La minería es una de las industrias más importantes en Chile. De hecho, ha estado presente a lo largo de la historia y forma parte esencial de la identidad del país. Con operaciones de norte a sur, esta industria se ha caracterizado a través de los años por ser un referente en la innovación del sector, por lo que, en este mes de la minería es importante destacar la transformación y evolución que vive para ser parte de la Industria 4.0 y mantenerse a la vanguardia.

Gracias a la adopción de nuevas soluciones digitales y arquitecturas cada vez más robustas, la minería contará con operaciones tan seguras como eficientes en el corto y mediano plazo. Y es que esta mina conectada estará habilitada para procesar, analizar e interpretar todos los datos que genera la operación y ofrecerá resultados sustanciales para el negocio.

Hoy en día vemos que la industria minera de nuestro país se ve enfrentada a varios desafíos, entre ellos lograr una gestión eficiente de la actividad y los recursos. Digitalizar la cadena de suministro de la minería, a través de los modelos de la Industria 4.0, será clave para que los operadores de minas tomen decisiones más informadas, aumentando la productividad, y mejorando la eficiencia y seguridad industrial.

El presente de la minería chilena confirma una buena posición a nivel mundial, situación que se ha visto beneficiada con la influencia de la transformación digital dentro de esta industria tan relevante para el país. En el corto plazo, las empresas han sido capaces de mejorar sus procesos operativos a través de la automatización, siendo el procesamiento de los minerales la cadena más autónoma, mientras que en la extracción aún es incipiente. Sin embargo, a largo plazo, se puede apreciar cómo la industria evolucionará y será más digitalizada, lo que sin duda le permitirá dar un salto en materia de innovación.

Las faenas mineras 4.0 son espacios de trabajo interconectados, donde soluciones tecnológicas como la analítica de video en procesos de control de seguridad de los trabajadores; la analítica de borde con el Internet de las Cosas (IoT) y Edge Computing que aporta más inteligencia a sensores y dispositivos; y la robótica aplicada, que automatiza procesos de alto riesgo y complejidad, son herramientas que, si se siguen adoptando, seguirán haciendo de la industria chilena un referente para otros países mineros de la Región.

Sin duda, digitalizar la cadena de suministro de la minería, a través de los modelos de la Industria 4.0, será clave para que tecnologías como el IoT se alimenten constantemente de data y puedan aprovechar todos los beneficios digitales que entrega la analítica, el machine learning y la Inteligencia Artificial (IA), lo que resultará en operadores de minas tomando decisiones más informadas, aumentando la productividad y mejoras de eficiencia y seguridad industrial.

Una de las grandes características de la industria minera es la necesidad de administración, control y monitoreo del trabajo desde puntos geográficos distantes. Ante este escenario, las soluciones de colaboración a distancia han dado respuesta a las nuevas tendencias de trabajo, permitiendo resolver problemas de una forma más rápida, evitando traslados que requieren tiempo y dinero, ayudando de esta forma a evitar el paro de producción.

Esto confirma la necesidad de la industria de contar con herramientas que permitan una comunicación fluida entre los trabajadores que se encuentran en faena y aquellos fuera de ella, muchas veces ubicadas a kilómetros de distancia e incluso en otras ciudades, permitiendo también el intercambio de conocimiento entre expertos ubicados en diferentes localidades.

Hoy más que nunca el riesgo cibernético es una de las mayores preocupaciones en el mercado. La convergencia de las tecnologías de la información y la tecnología operativa abren la brecha del negocio al tiempo que hacen de las empresas foco de ataques, volviéndolas vulnerables. En este sentido, es esencial contar con un plan de acción que ayude a monitorear, identificar, cuidar y reducir cualquier ataque ocasionado por hackers o criminales cibernéticos.

Poder tener visibilidad de todo lo que está pasando en la red IT y OT para detectar posibles ataques y tomar medidas de control de seguridad, se vuelve vital para la continuidad de la operación. En las distintas industrias un ciberataque puede llegar a afectar la economía de un país al verse afectada la operación, como lo es en la minera en este caso. Los riesgos y las consecuencias son muy altos.

En cualquier ambiente industrial es importante contar con una implementación tecnológica adecuada, mediante soluciones que permitan tener una mayor eficiencia operativa y procedimientos de calidad a través de la automatización.

Además, es importante señalar que los problemas de la seguridad en el interior de las minas son mucho más amplios y complejos extendiéndose a otras áreas de operación como la infraestructura, las redes, los procesos, la logística y de manera especial, la seguridad del personal y de quienes colaboran en toda la cadena productiva. Hoy la adopción de nuevas soluciones en la industria permite tener seguridad de extremo a extremo, no solo en materia de sistemas e infraestructuras, sino de activos y, más importante aún, para el cuidado de los colaboradores.

La tecnología es un aliado de las industrias en la actualidad, ya que con una estrategia sólida, metas definidas y una implementación a escala son muchas las oportunidades que brinda.