Marcelo Soto.

¿Qué objetivos tiene el Programa Industria Manufacturera 4.0?
Nuestro objetivo, a grandes rasgos, es acercarnos un poco a lo que están haciendo los países más desarrollados, de modo de incorporar la Industria 4.0 y todo lo relacionado con Manufactura Avanzada, es decir, todas las nuevas tecnologías y prestaciones más sofisticadas que permiten una mayor productividad. En ese sentido, nuestra misión es crear y mantener una industria B2B exportadora, de servicios, con capital humano calificado, y que aumente su participación en el PIB nacional.

¿En qué están trabajando actualmente?
La primera línea de trabajo es la inmersión para los tomadores de decisión de las empresas, los gerentes y dueños. Nos dimos cuenta, el primer año del programa, que en muchas empresas no solo se trata de tener gente capacitada para hacerse cargo del tema, sino también que lo que se necesita es que el dueño o gerente tenga clara la visión de lo que se nos viene, pues de lo contrario, pueden tener todos los proyectos tecnológicos que quieran, pero no llegarán a buen puerto. Entonces, ahí planteamos que lo que teníamos que hacer era una inmersión: “asustarlos” un poco, decirles esto se viene y no hay industria que se vaya a salvar, pero, por otro lado, estas son todas las oportunidades que se abren, incorporando tecnología, integrando procesos con los proveedores y clientes, etc.

La segunda línea de trabajo es crear capacidades tecnológicas, para lo que se formaron tres programas tecnológicos de Manufactura Avanzada: el consorcio Universidad de Chile-Universidad de Santiago de Chile-UTEM; otro con Leitat Chile; y el tercero, con la Universidad de Concepción-Universidad Católica de la Santísima Concepción e INACAP Biobío. Ellos tienen presupuestos durante cinco años no para desarrollar proyectos universitarios, sino soluciones concretas para resolver problemáticas industriales.

Finalmente, la tercera línea de trabajo, y la que hemos desarrollado con mayor profundidad, es cómo ayudamos a las empresas a transformarse. Con este objetivo, creamos un modelo PEMA de Transformación Digital hacia la Industria Digital para estas empresas.

¿En qué consiste el concepto de “Manufactura Avazada”?
En el campo de las empresas industriales, se busca que todas estas empresas estén interconectadas en todos los aspectos, desde el abastecimiento de la materia prima (qué va a llegar, cuándo, etc.), hasta cómo preparamos la producción del producto, entre otros. Eso es la Industria 4.0, la industria automatizada. Ahora bien, la Manufactura Avanzada es la tecnología que nos permite generar productos más sofisticados. Quizás la tecnología de Manufactura Avanzada más fácil de entender es la Impresión 3D, pues podemos incorporarla en una empresa, permitiéndonos hacer productos más sofisticados y con mayor productividad.

No obstante, usamos todos estos términos como sinónimos, porque en realidad, lo importante es comprender que esto no es solo tecnología, sino de ver cómo cambio el modelo de negocio, cómo me organizo de manera distinta y uso la tecnología para ver cómo produzco el cambio.

¿Cómo está Chile en este ámbito?
Vamos lento, pero también hay que entender que es una revolución que requiere mucho apoyo de las instituciones de gobierno, pero no podemos compararnos con lo que se está haciendo en los países desarrollados para impulsar sus respectivas industrias.

Como país, nos cuesta pensar en que tenemos que fortalecer la industria y, en ese sentido, uno de nuestros focos es atender a las industrias en las que tenemos ventajas competitivas, como, por ejemplo, Minería, Alimentos, Construcción y, eventualmente, sectores como el de la Energía. Ese foco está dado, principalmente, por las empresas que traccionan esos recursos. Tomemos el caso de las grandes mineras, que tiene tal tracción que hoy todos los grandes proveedores internacionales vinculados a ese sector están instalados en Chile; no obstante, lo importante es que se requieran productos y servicios nacionales, no de empresas extranjeras. Si bien estamos un poco “al debe”, esta industria en particular pide cada vez más requerimientos en esa línea. Hoy en día, las mineras están concentradas en Smart Mining y necesitan llegar en una docena de años a una operación cada vez más automatizada.

¿Qué pasa en otros sectores?
También estamos un poco atrasados, pero tampoco tenemos instancias que les permitan a estas empresas poder desarrollarse con mayor facilidad.

En todo caso, no es un problema exclusivo de nuestro país, sino que es latinoamericano. Con la excepción de México, los otros países tienen poco desarrollado este ámbito. Si nos damos cuenta, cada día más cualquier manufactura va asociada a un servicio digital. En el futuro, se plantea que no se comprará el producto, sino que se pagará el servicio. Entonces, queremos que las empresas entiendan que no se trata de un cambio de má- quinas, sino de un cambio de modelo, y en este aspecto, todos los programas que trabajamos en este ámbito, están haciendo avances.

¿Cuáles son las barreras a superar para cambiar a una “Manufactura Avanzada”?
La primera barrera es comprender a cabalidad el cambio tecnológico que estamos viviendo. Actualmente, las empresas se están dando cuenta que pueden hacer teletrabajo y seguir funcionando. El cambio tecnológico impactará a todas las organizaciones. La pregunta no es si me impactará o no, sino cuándo, y si no entienden que el escenario está cambiando, terminarán por desaparecer. La segunda barrera es que esto no tiene que ver solo con Tecnología, sino con Cambio. Por ello, se habla de Transformación Digital, no de digitalización. No se trata de digitalizar los procesos, sino transformar, repensar el espacio donde estamos ofreciendo nuestros servicios en la actualidad.

En tercer lugar, si bien esto no es solo Tecnología, necesitamos tener un plan. Por eso, dentro de nuestras iniciativas, se encuentra ayudar a las empresas a construir un plan, el que tiene que ser liderado a muy buen nivel. Por ejemplo, Codelco, cuando desarrolló un proceso como ese, entendió que la Transformación Digital tiene que estar en la primera línea, especialmente con su organización tan compleja. En consecuencia, decidió crear una nueva Vicepresidencia de Transformación Digital, dándole la importancia que tiene. Entonces, tenemos que llevar la Transformación Digital al nivel de todas las otras acciones; de lo contrario, si nos quedamos en proyectos “chicos”, no vamos a generar ningún proceso de transformación.

Hay otros elementos secundarios, pero relevantes, como por ejemplo, que la empresa tenga experiencia en innovación. Si me quiero transformar, es un cambio, por lo que se recomienda tener algún expertise trabajando cambios, para tener menores dificultades en implementarlos.