Sandra Rodríguez Lara.

¿Qué rol tienen los organismos de certificación, inspección y laboratorios de ensayo?
Los Organismos de Evaluación de la Conformidad cumplen un rol clave en el desarrollo de productos de calidad, seguros y eficientes. Tanto los Laboratorios de Ensayo como los Organismos de Inspección, evalúan el cumplimiento de los productos con las diversas normas de seguridad, eficiencia energética y/o instalaciones, entre otras. Por su parte, los Organismos de Certificación analizan estas evaluaciones y deciden si el producto en cuestión cumple o no los requisitos para la emisión de un Certificado de Aprobación.

En este tema, ¿es suficiente la actual normativa nacional o es necesario actualizarla?
La normativa aplicada a los conductores eléctricos está basada en la normalización internacional, la que tiene una evolución acorde a la industria con el desarrollo de nuevas materias primas y la modernización de los procesos de fabricación. En particular, la última revisión de las normas y de los protocolos data del año 2011, por lo que requiere de una actualización, a través de la formación de comités técnicos que puedan analizar las modificaciones en estas regulaciones y su efecto en la fabricación nacional y en la certificación.

En la actualidad, ¿a qué tipo de pruebas deben someterse estos conductores?
Existen diferentes ensayos, dependiendo de la característica a evaluar: espesores de aislamiento, espesores de cubierta, diá- metro del conductor, resistencia eléctrica del conductor, propiedades mecánicas del aislamiento y cubierta (sin envejecer y envejecidas), resistencia de aislamiento, voltaje aplicado, propiedades físicas del material aislante a bajas y altas temperaturas, flexibilidad en cordones, ensayo de llama, no propagación del incendio, determinación de halógenos, emisión de humos, entre otros.

¿Cree que existen actores en el mercado que están comercializando cables sin las pruebas requeridas por la regulación?
Basados en diversos estudios de mercado, se puede inferir que en todos los productos eléctricos afectos a la certificación existen actores del mercado que no cumplen con la normativa nacional.

Uno de los factores que influye en esta situación, es que no hay una barrera en Aduana para el ingreso de productos no certificados, además de que la definición poco clara de algunas partidas arancelarias permite incorporar productos regulados bajo una clasificación que no es la precisa. Otro factor es la falta de ética de ciertos comerciantes que, al comercializar productos sub-estándar, no consideran el riesgo para la ciudadanía.

Por último, la falta de información de los consumidores respecto de los riesgos en que incurre al adquirir productos que no cumplen con los requerimientos mínimos de seguridad. Todos los aspectos mencionados permiten que se comercialicen conductores eléctricos (así como otros productos regulados) de mala calidad y poco seguros.

No obstante, es importante dejar en claro que el comercio establecido y toda la cadena formal de comercialización de conductores eléctricos sí cumplen con la regulación vigente.