Enfrentando la reticencia al cambio tecnológico Por Fernando Gariazzo, Gerente de Ventas de Ceskat Systems S.A., empresa del grupo Soltex. / www.ceskat.cl Cuando hablamos de incorporación de tecnología para el sector industrial y específicamente el minero, es habitual que encontremos cierta reticencia a probar nuevos equipos y soluciones, en particular en el ámbito de la Automatización y la Conectividad Industrial. La razón es muy simple: “¿Para qué probar algo nuevo, si lo que tengo hoy está probado, lo conozco bien y funciona?”, se preguntan muchos supervisores y operarios.
Por lo anterior, para toda empresa dedicada a la provisión de soluciones tecnológicas, es importante el desarrollo de propuestas de trabajo de fácil implementación que, en lo posible, se puedan probar o implementar de manera paralela a los sistemas existentes, con el objetivo de mostrar en terreno las ventajas y beneficios de la tecnología a adoptar.
En esa línea, los distintos proveedores presentes en el mercado chileno deben enfrentar a diario el desafío de presentar estas propuestas a sus contrapartes dentro de la industria, romper los paradigmas existentes y esperar que estos últimos se atrevan a considerar equipamiento y tecnologías diametralmente opuestas a lo que ya conocen y tienen operando en planta. Más que por una problemática técnica, esto pasa por la personalidad de los responsables de tomar la decisión de compra, pues, y como en todo orden de cosas, existen personas tomadoras de riesgo y otros más cautelosos. Abandonando tecnologías obsoletas Como ejemplo, nos encontramos con casos de plantas operando con tecnologías de hace más de una década, las que presentan accesos extremadamente lentos en la entrega y procesamiento de datos, pero -nuevamente- funcionan, son conocidas y son seguras. Cualquier nueva propuesta es mirada con recelo, incluso cuando hoy es posible tener un acceso inmediato a la información proveniente desde planta, permitiendo mejorar rendimientos, programar mantenciones predictivas, etc.
Por todo lo anterior, es una obligación demostrar a los usuarios las ventajas y beneficios de acceder remotamente y en el instante deseado a todos los datos requeridos para la toma de decisiones en línea, con los respectivos registros, validaciones y autentificaciones que todo proceso requiere, mostrando, además, que las mismas no generarán un perjuicio en lo laboral para los trabajadores que manejan esta información y realizan las posteriores evaluaciones en el proceso final de toma de decisiones.
Finalmente, se trata de un desafío para los proveedores, quienes deberán proponer un trabajo más bien consultivo, que no va solo en los aspectos técnicos, sino también en construir y generar las confianzas requeridas para dar el salto tecnológico que se requiere. |