Trabajar con Baja, Mediana y Alta Tensión siempre representa un riesgo, y lamentablemente los accidentes relacionados con electricidad suelen ser graves. Según los organismos especializados en Seguridad y Salud Ocupacional, más del 75% de los accidentes de trabajo ocurridos en la industria eléctrica se originan por falta de conocimiento y capacitación, problemas de seguridad técnica y personal insuficiente. Al referirnos a la seguridad eléctrica, podemos hacer una separación entre quienes son parte del personal calificado del rubro y el usuario promedio, es decir, las personas no calificadas a quienes se les provee un sistema y que, ante una falla, seguramente desconocerán la causa. Para ambos, la normativa es crucial porque indicará las exigencias que debe cumplir la instalación y qué tipos de producto utilizar. En el caso del usuario calificado, le dirá además cómo vestirse y manipular la electricidad para que la intervención sea segura.

Cabe recordar que es necesario que todo instalador conozca la NChEléc. 4/2003, norma que reglamenta la instalación eléctrica en Chile y que hoy se encuentra en pleno proceso de actualización.

En una vivienda, puede haber muchos riesgos, por lo que las normas establecen que debe existir un interruptor diferencial, el que desconecta el paso de la energía cuando el usuario sufre una descarga eléctrica accidental. Asimismo, establece la forma en que este dispositivo debe instalarse para que el usuario no calificado tenga seguridad.

Una persona debiera presionar una vez al mes el botón del interruptor diferencial para confirmar su correcto funcionamiento. En este sentido, sería aventurado decir que esto garantiza que todo está perfecto, pero al menos indica que la instalación goza de una "salud" aceptable. De igual modo, la normativa indica cómo mantener correctamente una instalación eléctrica, de lo que se desprende la importancia de la certificación, ya que es esta la que entrega ciertas garantías que obligan a mantener las condiciones de seguridad de la instalación. Por ello es que se vuelve fundamental el no economizar a la hora de seleccionar un buen instalador, pues sus conocimientos son vitales para la seguridad del inmueble y de sus ocupantes.

En Chile, existe conciencia de que el nuestro es un país sísmico y es positivo reconocer la necesidad de estar permanentemente preparados. Para ello, la normativa exige sistemas de iluminación de emergencia para ayudar en la evacuación de lugares públicos y privados. Estos sistemas cuentan con una autonomía determinada para estas situaciones.

Complementando lo anterior, cabe mencionar que en edificios de oficinas también existen sistemas de desactivación automática de seguros de puertas al momento de un corte de energía. La idea de estos distintos sistemas de emergencia es evitar el pánico, uno de los principales generadores de accidentes.

Finalmente, es importante destacar que las instalaciones eficientes no necesariamente son las más avanzadas en temas de seguridad, pues Eficiencia se confunde frecuentemente con Ahorro, y por bajar los consumos puede desatenderse el tema de la seguridad.