El mantenimiento proactivo, es decir, medir los indicadores clave en equipos importantes para descubrir fallas inminentes y luego programar el mantenimiento antes de que ocurran las fallas o haya tiempo de inactividad de los equipos, es mucho más rentable y eficiente que esperar a realizar el mantenimiento cuando ocurran las fallas. Además, el mantenimiento proactivo con tiempo de inactividad planificado permite a los gerentes de mantenimiento:
Minimizar la cantidad de tiempo que una instalación está fuera de servicio.
Hacer el mejor uso del personal.
Tener a mano los repuestos necesarios para realizar las reparaciones.
Para implementar un programa de mantenimiento proactivo, es importante saber no solo qué equipo necesita reparación, sino también el origen de las fallas inminentes. El uso de herramientas de prueba para medir los indicadores clave del equipo principal ayuda a los técnicos a descubrir los orígenes de las fallas (Tabla 1).
Tabla 1. Ahorros promedio de los programas de mantenimiento predictivo industrial.
Fuente: Programa Federal de Gestión de la Energía (www1.eere.energy.gov/femp/ program/om_predictive.html).
Las herramientas de investigación varían de multímetros digitales portátiles, pinzas amperimétricas y medidores de resistencia al aislamiento hasta medidores especializados para circuitos de motores. Muchas instalaciones realizan combinaciones, según el equipo y la escala de las operaciones. La diferencia radica en que estos técnicos están cambiando el uso tradicional de las herramientas de solución de problemas para los programas de medición del mantenimiento proactivo (Tabla 2).
Tabla 2. Mediciones con herramientas de prueba portátiles.
Directrices de medición
Las mediciones de mantenimiento proactivo no son tan diferentes de las pruebas de solución de problemas. Buscará señales de posibles fallas, así que tomará las mediciones relacionadas con los modos de falla.
1. Para cada tipo de equipo, identifique las posibles fallas y los indicadores clave asociados.
2. Determine qué medidas pueden reducir la posibilidad de problemas.
3. Determine con qué frecuencia debe medir las necesidades del equipo.
4. Recopile y realice seguimiento a los resultados, espere las tendencias e inicie las reparaciones necesarias.
5. Integre todas sus tecnologías de mantenimiento en un sistema computarizado de seguimiento de datos, de modo que compartan las mismas listas de equipos, historiales, informes y órdenes de trabajo. Cuando los datos se correlacionan con todas las tecnologías utilizadas, las condiciones de funcionamiento de todos los bienes pueden analizarse y publicarse en un formato integrado.
Artículo gentileza de Intronica Ltda. www.intronica.com