| ¿Cuál es su opinión de la Agenda de Energía del Gobierno?
Es un buen documento, pues establece de manera concreta un conjunto de medidas con plazos y metas bien establecidas. Además, fue realizado de manera rápida y considerando los puntos de vista de distintos actores de la industria y la sociedad, ya que participaron autoridades políticas, universitarias, organizaciones y ecologistas, entre otros actores. Esto es muy importante, porque en gobiernos de cuatro años se necesita una rápida implementación para no perder tiempo.
Entonces, ¿hay un compromiso por solucionar el problema de la energía?
Exacto. Es un muy buen trabajo del Ministro Pacheco, pues habla de soluciones concretas a nuestra actual crisis energética. Por mucho tiempo se sostuvo que en el Ministerio de Energía lo único renovable que había eran los ministros, porque tuvimos siete autoridades en cuatro años. En cambio, con la Agenda de Energía hablamos de un compromiso legislativo y normativo. ¿Qué falta mejorar?
El primer desafío es que este no sea un documento de política pública, sino que una medida del Estado de Chile. Esto quiere decir que necesitamos un alineamiento del Ministerio de Energía, Bienes Nacionales, las autoridades encargadas de hacer los Estudios de Impacto Ambiental y la sociedad en general. No puede ser que actualmente se rechacen proyectos de generación tradicional, así como iniciativas de ERNC. Esto revela que no estamos haciendo bien las cosas. En la última década, el Estado de Chile ha tomado un rol muy pasivo en materia energética, ya que antes era promotor de iniciativas y era propietario de empresas. Sin embargo, hoy tiene un rol de árbitro, pues dejó en manos de privados las iniciativas de nuevos proyectos energéticos. Eso hizo que la población tuviera un fuerte rechazo, pese a la importancia y necesidad de estas iniciativas. La sociedad reclama que tiene poca participación...
El Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental incorpora la participación ciudadana tanto en los estudios como en las declaraciones de impacto ambiental. Sin embargo, y debido a la fuerte oposición social, es fundamental incrementar su participación y, también, hacer que las comunidades reciban beneficios por la instalación de un proyecto en una determinada región. Debiera haber incentivos para las personas, a fin de que se sientan comprometidas con un  proyecto. Para ello, las empresas de generación deben ser más transparentes y potenciar proyectos mucho más amigables con el medioambiente.
¿Con esta medida bastará para solucionar la oposición ciudadana? Este es un tema que siempre ha existido
Este es un tema que siempre ha existido y existirá para proyectos energéticos, estadios de fútbol, rellenos sanitarios o cárceles, por dar unos ejemplos. No obstante, todos necesitamos estas infraestructuras, por lo que debemos buscar un equilibrio entre estos desarrollos y la sociedad, lo que significa que deben cumplir con la normativa actual, pues son un bien común. Viendo esta realidad, desde mi punto de vista existen tres grandes observaciones a la Agenda de Energía. La primera es el rol que debe cumplir el Estado. No puede seguir como árbitro de conflictos; por el contrario, debe asumir un rol protagónico.
¿Con esta medida bastará para solucionar la oposición ciudadana?
Este es un tema que siempre ha existido y existirá para proyectos energéticos, estadios de fútbol, rellenos sanitarios o cárceles, por dar unos ejemplos. No obstante, todos necesitamos estas infraestructuras, por lo que debemos buscar un equilibrio entre estos desarrollos y la sociedad, lo que significa que deben cumplir con la normativa actual, pues son un bien común. Viendo esta realidad, desde mi punto de vista existen tres grandes observaciones a la Agenda de Energía. La primera es el rol que debe cumplir el Estado. No puede seguir como árbitro de conflictos; por el contrario, debe asumir un rol protagónico.
¿Qué otros aspectos deben mejorar?
El otro es el Ordenamiento Territorial, donde algunos sectores piensan que se puede planificar la instalación de centrales de generación, a fin de evitar conflictos con la población. Ese es un error, porque mientras no haya beneficios, siempre tendremos oposición ciudadana. Asimismo, existen zonas que son mejores para el desarrollo de proyectos, por lo que estaremos desperdiciando importantes MW de energía en desmedro de otro. Eso establece problemáticas relacionadas con los derechos de agua, dueños de terrenos, etc.
 Finalmente, debemos aumentar la oferta de generación para bajar los precios, algo que no aparece detallado en este documento. No existen capitales para lo anterior, lo que obviamente evitará una disminución de los costos de energía eléctrica. Si existiera un apoyo concreto del Estado -como un sistema de garantías o beneficios impositivos- sería mucho más fácil conseguir créditos con los bancos para ejecutar un proyecto. Como ahora hay un escenario de incertidumbre, los capitales cada vez están más escasos.
Viendo su experiencia, ¿qué matriz energética debemos potenciar?
No soy de los que piensan que en unos años más nuestro país debiera tener un cierto porcentaje de hidro, ERNC o fuentes tradicionales de generación. Debemos tener una matriz energética que se base en el desarrollo y crecimiento del mercado, pero que a la vez sea eficiente y sustentable. Cada región debe aprovechar sus fortalezas locales para generar energía; de lo contrario, estaremos desperdiciando MW de energía sumamente importante para el crecimiento de Chile y su economía. |
