| Usos y mitos de la energía geotérmica | | | Artículo gentileza Centro de Excelencia en Geotermia de Los Andes (CEGA). Mayor información en www.cega.ing.uchile.cl | | | | |  | | El centro de nuestro planeta es casi tan caliente como el exterior del sol. Es por ello que desde que se formó, la Tierra ha estado liberando este calor interno. La forma más efectiva que tiene de hacerlo es a través de volcanes y dorsales oceánicas.
Si una zona tiene muchos volcanes, el calor subterráneo estará mucho más cerca de la superficie y, por lo tanto, es mucho más fácil aprovecharlo. Chile es una de esas zonas. Tenemos unos tres mil volcanes a lo largo de nuestra Cordillera de los Andes, y cerca de 150 de ellos están activos. Esto demuestra que nuestra tierra nos entrega muchísimo calor para generar energía geotérmica.
Si queremos aprovechar este escenario para obtener energía, necesitamos contar con algunos elementos básicos. Ya tenemos la fuente de calor, pero además necesitamos un acuífero, agua y un sello. El acuífero es una roca que está caliente y puede ser atravesada por el agua, la cual (generalmente) proviene de fuentes subterráneas naturales, circula por el acuífero y se calienta. El sello es otra capa de rocas impermeable; es una “trampa” que mantiene al agua atrapada y siempre caliente.
Cuando todas estas condiciones se dan, estamos frente a un reservorio geotermal. Desde estos podemos extraer calor para calefaccionar hogares, temperar invernaderos o criaderos de peces, deshidratar vegetales y secar madera, entre otros usos. Además de todo esto, con la geotermia también se puede generar mucha energía eléctrica.
Esta energía se utiliza hace más de 100 años en muchas partes del mundo. En nuestro país existen algunas alternativas, pero aún no hemos desarrollado todo su potencial; por eso debemos trabajar para generar conocimiento técnico y científico respecto al uso de la geotermia en Chile.
 Usos directos
Recordemos que la geotermia es la energía que proviene del calor interno de la Tierra y se puede usar de dos formas. Cuando podemos acceder a temperaturas mayores a 150 ºC, se puede generar electricidad, mientras que cuando la temperatura del subsuelo va de 10º C a 150 ºC, se puede usar de forma directa para cualquier proceso que requiera calor. A esto se le conoce como geotermia de baja temperatura y es el uso más popular que tiene esta fuente en el mundo.
Pasado los 10 metros de profundidad, el calor bajo la tierra se mantiene a una temperatura constante, es decir, que durante todo el año no presenta variación. Este calor que se encuentra en el subsuelo se puede “subir” hasta la superficie mediante tuberías.
Usar este calor nos permite ahorrar, ya que con un sistema de calor convencional necesitamos llevar la temperatura del agua desde 0º C hasta 38º C, en cambio, las bombas de calor geotérmicas aprovechan el calor bajo la tierra y solo hay que llevar la temperatura del agua desde 15º C hasta 38º C. Esto quiere decir que hogares, escuelas y oficinas pueden usar la geotermia para calefaccionar espacios y agua. La industria también puede utilizar la geotermia para casi cualquier proceso que requiera de calor con un costo de operación menor en comparación a las fuentes energéticas convencionales.
Otro aspecto importante es que Chile tiene el potencial geotérmico más grande de América del Sur, pero hasta ahora nuestro país la utiliza casi exclusivamente para recreación y turismo. Muchas de nuestras principales industrias dependen del combustible extranjero para suplir sus demandas. La geotermia es una energía local, limpia, renovable, inagotable y presente de Norte a Sur. De explotarla, podríamos producir alimentos, madera o vinos, entre otros productos, de forma más limpia, sustentable y económica.
 Mitos más comunes sobre la Geotermia
La geotermia es una fuente de energía con muchas ventajas. El problema es que es desconocida, lo que hace que se rodee de muchos mitos. Algunos de los más comunes son los siguientes:
La geotermia consume el agua subterránea: La geotermia no usa agua dulce o subterránea de consumo humano, animal o vegetal para producir energía. El fluido que utiliza está muchísimo más profundo que el agua subterránea y debe devolverse a su depósito original para mantener la presión, equilibrio y sustentabilidad de la planta. Una vez que el fluido se re-inyecta al reservorio, se vuelve a calentar con la temperatura interna de la Tierra y se puede usar una y otra vez para producir electricidad.
La geotermia contamina: Lo que sale de las chimeneas de una planta geotérmica es vapor y no humo. La geotermia es uno de los sistemas de producción de energía más limpios, con casi cero emisiones de CO2. Además, las plantas son compatibles con tierras agrícolas y turismo, y ocupan poco espacio. Durante su funcionamiento, el ruido que emiten es mínimo y los fluidos geotérmicos que contienen minerales se controlan para devolverse al reservorio.
Producir energía geotérmica es caro: Cuando se afirma lo anterior, se hace referencia a los altos costos de inversión en la etapa inicial, es decir, para explorar la zona más apropiada para instalar una planta. Sin embargo, el costo de operación y mantención, que finalmente impactan a los usuarios, es menor en comparación a las plantas de generación de energías convencionales.
Producir energía geotérmica solo es posible en el Norte: Los sistemas geotérmicos en Chile están asociados a los más de 3.000 volcanes ubicados de Norte a Sur del país. La creencia que el Norte es el único lugar privilegiado para la geotermia se debe a que las primeras exploraciones se hicieron en esta región del país. Esto demuestra que, en la actualidad, la exploración geotermal es posible y existe en todo Chile. | |
