Juan Carlos Rodríguez, Sociedad Comercial Keim: “El mercado chileno tiene un gran desconocimiento respecto a la problemática de los armónicos”

De acuerdo a la amplia experiencia de esta firma local, aún falta mayor conciencia en el mercado respecto a temas como el factor de potencia y los armónicos. Juan Carlos Rodríguez, Encargado de Desarrollo de Sociedad Comercial Keim, sostiene que los consumidores se preocupan fundamentalmente del precio y del nivel de consumo de los productos, pero no toman en cuenta la reducción de la vida útil y la operación errática de los equipos electrónicos que generan los armónicos.

¿Es cierto que las lámparas LEDs producen armónicos? Los armónicos son producidos por motores o componentes electrónicos. En ese sentido, el LED es un componente electrónico semiconductor de corriente discontinua, entonces, efectivamente genera armónicos. Ahora bien, hay que tener muy presente que aunque se produzcan armónicos, este fenómeno se puede exigir que venga filtrado en la fuente, con el objeto de reducir la cantidad generada y lograr niveles aceptables o compatibles con las exigencias y normativas actuales. ¿Cómo abordan este problema? Hace ya casi cinco años, nuestros clientes de la empresa Chiletabacos, nos aportaron información al respecto de la generación de armónicos por los sistemas LED. Descubrimos que nuestros primeros tubos producían un nivel de THD (Distorsión Armónica Total) cercano a un 40%. A partir de ese momento, comenzamos a hacer las pruebas con la misma compañía de ingeniería que había asesorado a esta firma tabacalera, y a exigir a nuestros importadores que el THD no sobrepasara el 15%. Es importante recordar que, a esa fecha, no existía límite o norma alguna, pero tomamos la iniciativa y nos autorregulamos en esta materia. Hoy en día, no tenemos problema alguno en materia de armónicos, ya que nuestros productos son previamente filtrados en su fuente original. ¿Cómo evita lo anterior la industria? A partir de 2012, entró en plena vigencia la Norma Técnica de Seguridad y Calidad de Servicio (Artículo 250 del D.S. 327/97), la que establece que el máximo nivel permitido de armónicos en una instalación eléctrica es de un 13%. A modo de ejemplo, se puede señalar que las lámparas fluorescentes pueden registrar THD superiores al 150%. El gran problema, en este sentido, es que aún no se visualiza fiscalización del cumplimiento de esta norma; además resulta muy costoso para las empresas llevar a cabo este cambio, considerando los altos precios de los filtros pasivos y activos de armónicos. Por lo tanto, va a pasar un buen tiempo antes de que las compañías asuman la tarea de ejecutar esta modificación. Eso sí, existe una excelente solución para eliminar la totalidad de armónicos en iluminación: 100% LED conectada a energía continua. Por ejemplo, si existiesen las luminarias de las vías públicas operando con paneles solares, no habría ningún inconveniente. ¿Existe conciencia sobre este tema? A nivel general, no dan mayor importancia a esta materia, ya que prácticamente todos los sectores productivos desconocen la problemática de los armónicos como, por ejemplo, distorsionan la onda de tensión al interactuar con la impedancia del sistema originando la reducción de la vida útil en motores y causando la operación errática de equipos electrónicos. Sólo algunas corporaciones, preocupadas más por la Eficiencia Energética que con cumplir con la norma, están haciendo algo para disminuir sus armónicos. En general, los pequeños proveedores no son del área eléctrica o electrónica, por lo que desconocen estos conceptos y no los especifican en sus requerimientos al hacer las importaciones. Esto está mal, porque el control de los armónicos es importante, ya que su presencia afecta la vida útil de los equipos electrónicos conectados en la misma red, afectando los presupuestos de mantención y recambio de éstos.