GRUPOS ELECTRÓGENOS Un aliado clave en tiempos de escasez energética

Por Angel Arias Quezada, Ingeniero Electricista, Asesor en Areas de Electricidad, Electrónica y Automatización, INACAP Casa Central. • www.inacap.cl

Los grupos generadores o equipos electrógenos han ido adquiriendo cada vez más importancia, debido a diversas razones: el crecimiento de la demanda de energía eléctrica en el país, las posibles restricciones de suministros por parte de las empresas eléctricas y/o los posibles cortes de energía eléctrica, junto a las exigencias de contar con la continuidad del servicio eléctrico para el funcionamiento de los procesos que dependen de dicha energía.

Una de las principales ventajas de los grupos electrógenos es que son una fuente de energía autónoma de gran importancia para abastecer la demanda en régimen permanente o de emergencia en empresas, industria, edificios, entre otros. En ciertos casos, estos equipos se disponen como fuente de respaldo ante posibles cortes o restricciones de energía y también como un sistema de producción de electricidad en horas punta, con el objetivo de disminuir costos de energía eléctrica. Para esto se acoplan en paralelo con la red de energía o simplemente en este lapso de tiempo adaptan sus procesos a la potencia del o los generadores, desconectándose de la red de energía de las empresas eléctricas. En la actualidad, en Chile están presentes las marcas más importantes de grupos generadores del mundo. Los distintos proveedores han puesto a disposición del mercado chileno un portafolio muy variado de equipos, con diferentes potencias y funcionalidades. Adicionalmente, se ofrecen otros sistemas y accesorios que se deben considerar, según su necesidad, en su instalación, operación y mantención, como las cápsulas de insonorización, estanques auxiliares de combustibles, sistemas de control electrónicos, sistemas de transferencia automática, etc. ¿Cómo seleccionar un equipo? La elección de un grupo electrógeno debe considerar la amplia variedad de modelos, tipos y marcas que se presentan en el mercado, seleccionando la alternativa que mejor se adapte al requerimiento de uso, considerando aspectos tales como costo, calidad, garantías y prestaciones postventa. De igual forma, debe cumplir con las normas y medidas medioambientales. Entre los aspectos técnicos a considerar, se encuentran: • Tipos de cargas o consumos (potencias) que el grupo debe abastecer, como cargas lineales, no lineales, motores, bombas, ascensores, etc. • Magnitudes de potencia nominal y de partida de dichas cargas. Se recomienda que todas sean expresadas en la misma unidad de medida (por ejemplo, kilowatt). • Períodos de usabilidad del grupo: Régimen permanente, forma aislada o trabajando en paralelo con la red pública, para caso de fallas, sólo como sistema de emergencia para cargas críticas, etc. • De igual forma, se debe definir si la tensión generada debe ser monofásica o trifásica. • La ubicación es otro factor importante. Se debe considerar el nivel de ruido que produce el grupo, que dicho nivel esté dentro de las normas de contaminación acústica y la necesidad de cámaras insonorizadas. • Asimismo, se deben elegir los elementos accesorios para el grupo electrógeno, como sistemas de arranque (manual o automático con sistema de transferencia), estanques de combustible auxiliar, cápsulas de insonorización, calefactores y/o refrigeración. • La evaluación del costo de utilización deberá estar basada en el tipo de combustible que se necesitará, mantenimiento requerido y sistema de refrigeración necesario. Tecnología Distintas empresas han desarrollado nuevas líneas de grupos electrógenos para optimizar el rendimiento de dichas máquinas. Algunos de ellos han sido diseñados para ser utilizados como medio principal de producción de energía eléctrica o sólo en caso de emergencia, para prestar un servicio continuo y un servicio de gestión de carga en sectores industriales e inmobiliarios. Los avances más notables son en aspectos de arquitectura de motores, mayor fiabilidad en procesos continuos y ante la conexión cada día más frecuente de cargas electrónicas o no lineales, las que someten al equipo a sobreesfuerzos extras, como así también el mayor gasto de combustibles. De igual forma, se ha mejorado en el control de las emisiones de gases y material sólido (partículas), sin necesidad de reducir la potencia generada. Finalmente, los sistemas de control automático, monitoreo y operación a distancia han incorporado sistemas de control inteligentes, lo que optimiza la operación y control de los grupos electrógenos, y también permite obtener información actualizada de distintos parámetros para un mantenimiento preventivo y, con ello, aumentar la vida útil del grupo electrógeno. Servicios de pre y postventa Cuando se trata del servicio de pre y postventa, hay que evaluar la experiencia y capacidad financiera del proveedor. La trayectoria y solvencia aseguran un adecuado servicio de postventa. Además de tener personal técnico preparado y disponer de repuestos en forma oportuna y a un costo razonable -incluso en regiones-, el proveedor debe garantizar que los equipos adquiridos hoy contarán con piezas de recambio y mantención permanente. Por ello, es importante seleccionar proveedores con capacidad técnica y logística, y verificar inventario y suministro de repuestos en forma oportuna y a precios razonables.