Los motores de Rotor Bobinado (Wound-Rotor Induction Motor o WRIM) difieren ligeramente de los motores de inducción Jaula de Ardilla, encontrándose la principal diferencia en los niveles de torque que éstos pueden generar y el circuito aplicado al rotor del motor (resistencia rotórica y un contactor de cortocircuito).
Mediante la inserción de la resistencia en el circuito del rotor (en serie con los bobinados), podemos obtener el aumento del deslizamiento del motor, multiplicando el torque de arranque y la reducción de corriente (inrush). A medida que el motor aumenta la velocidad, la resistencia disminuye mediante pasos, logrando como resultado la velocidad máxima del equipo. Una vez que se elimina por completo la resistencia, el deslizamiento se reduce al mínimo, mejorando drásticamente la eficiencia de funcionamiento del motor.
Las aplicaciones típicas que se hallan en la gran Minería y en plantas industriales, se basan en sistemas electromecánicos bastantes complejos y engorrosos. Estos consisten en aplicar plena tensión (Full Voltage) al estator de motor; en adición, se utilizan contactos que van progresivamente cortocircuitando los pasos de resistencia a medida que el motor acelera. Estos contactos electromecánicos requieren un mantenimiento periódico y constante, lo cual se traduce en gastos excesivos (Ver figura 1).
En la actualidad, existe una alternativa sencilla y rentable al uso de los mencionados sistemas: un Arrancador de Estado Sólido aplicado al estator del motor, junto a una resistencia rotórica de magnitud acorde a la aplicación (Ver figura 2). El arrancador tiene la capacidad de generar rampas de aceleración del motor, modificando la velocidad de deslizamiento (determinado por el valor de la resistencia), y luego, mediante una señal del partidor, se activa el contactor de cortocircuito, obteniendo que el motor alcance su máxima velocidad (mínimo deslizamiento, máxima eficiencia).
Esta configuración proporciona todas las protecciones electrónicas del motor, disminuye los pasos de arranque, manteniendo un alto torque y una baja corriente de arranque igual que los partidores electromecánicos comúnmente empleados, pero sin la necesidad de realizar mantenimientos constantes.
Dado que la resistencia del rotor debe ser compatible con las características del rotor del motor y la aplicación, a continuación se presentan los datos necesarios para especificar (de manera aproximada) la solución adecuada para cada caso:
Potencia Nominal del motor y RPM.
Voltaje y Corriente nominal (Estatórica).
Voltaje y Corriente Rotórica (voltaje secundario).
Ciclo de trabajo.
Aplicación.
Altura Geográfica.