A lo largo de los años han existido distintos mecanismos para evadir el pago efectivo de la energía eléctrica, los que se encontraban enfocados en evitar que los medidores registren el verdadero consumo realizado por una casa, oficina o industria. Sin embargo, se han dado casos en que son los usuarios los que pueden verse afectados, teniendo que pagar cifras que no corresponden.
En primer lugar, estaba inicialmente el robo de energía que se hacía antes del medidor. La electricidad venía en dos conductores (fase y neutro), por lo que se “colgaban” de ellos e iban sacando energía antes de llegar al medidor. No obstante, el sistema actualmente es más complejo, ya que el cable se cambió por uno concéntrico, que es un conductor que tiene un pelo central y una malla alrededor, y ahí se saca la energía dentro del mismo conductor (que en este caso es uno). Además, al llevar los cables en su interior, tanto la fase como el neutro, se hace más difícil que algunas personas puedan robar energía porque tienen que intervenir mucho el cable.
Otro aspecto importante que debe tener en cuenta el consumidor final se relaciona con la alteración que también genera variaciones en los valores de consumo, pero en este caso afecta directamente a los usuarios. Existen muchas empresas que comercializan medidores eléctricos de dudosa procedencia, los cuales sirven tanto para 110 como para 220 Volts, por eso se ha dado la situación de que hay gente que dice que le están cobrando el doble del consumo. Lo anterior pasa porque el equipo está configurado en 110V y está trabajando en 220V, es decir, se encuentra con un factor multiplicador del doble.
Lo anterior refleja que estos medidores no son de muy buena calidad, y esto se justifica porque se han tenido que calibrar al momento que llegan los medidores desde el extranjero. Esto llama la atención, porque viniendo de fábrica debiese venir ajustado y listo para utilizarse en nuestro país.
Los nuevos medidores
Una tendencia que estamos viendo en el último tiempo en nuestro país guarda relación con que todas las casas nuevas están utilizando equipamientos nuevos. Se trata de medidores electrónicos que son capaces de captar la energía que está entrando y saliendo, y todas las frecuencias que puedan darse dentro de ella; en cambio, el medidor antiguo era capaz de captar una sola frecuencia y por lo tanto, podía tener otros consumos que no los estaba cobrando.
Este tipo de aparatos surge porque hoy en día hay demasiada tecnología que está haciendo variaciones en la frecuencia del consumo. Ahí aparecen los términos de armónicos o de suciedad en la red, y todo esto también les ayuda a cobrar más en las casas. Esto se puede notar si se coloca un filtro activo en una casa; ahí baja de inmediato el consumo, ya que el filtro está limpiando la red de toda esa suciedad electrónica que existe.
Para revertir esta situación, se debe comprar un nuevo medidor que presente el certificado de calibración. No obstante, no se trata de llegar y cambiarlo, ya que para realizar correctamente este procedimiento, hay que avisar a la compañía suministradora de este servicio para que venga y cobre una serie de costos, sin olvidar que se debe presentar una serie de documentos.
