| | Andrés Gorenberg, SIEMENS | | | | Roberto Hourton, ASISTEK | | | | Cristián González, VICTRONICS-AIE | | | | Manuel Esquivel, ROCKWELL AUTOMATION | | | | Fabián Hernández, INTERLOG | | | | Iván Venegas, GENERAL ELECTRIC | | | | Rodrigo Tapia, FABELEC | | | | Rodrigo Sepúlveda, SCHNEIDER ELECTRIC | | | | Ariel Pérez, SPARQ TECHNOLOGY | | | | Helmut Schädler, E.i. SCHADLER | | | La microautomatización es una tendencia que a nivel mundial ha experimentado un crecimiento significativo dentro del ámbito del desarrollo electrónico, caracterizado por un fuerte nivel de competencia. Durante los últimos años las más importantes marcas se han orientado a la producción en masa de sistemas de microautomatización, motivadas por una demanda creciente y sostenida de parte del mercado. Los principales motores de este interés -que permite a este mercado crecer cerca de 30% anualmente- lo constituyen las aplicaciones de automatización menores, como pequeñas tareas dentro de grandes procesos industriales junto con aplicaciones específicas, como la automa-tización del hogar. En muchos, casos los microcontrola-dores han reemplazado complejos sistemas de relés, pero sus promotores aseguran que más que ocupar el lugar de los PLCs tradicionales, la microautomation ha permitido automatizar procesos simples y pequeños, a costos razonables que han hecho posible llegar a un mercado masivo, impensado hasta hace algunos años atrás para los fabricantes, integradores y clientes finales. La medida justa para pequeños procesos En términos simples, para Andrés Gorenberg, Gerente de Automatización de Siemens, "microautomatización es una alternativa de solución para automatismos, donde se requiere una adecuada relación costo-beneficio y para los cuales los sistemas de automatización normales exceden las características que los usuarios necesitan utilizar. Es decir, se trata de soluciones puntuales para determinadas necesidades, que aplican a máquinas de mediano y bajo costo, lo que naturalmente las hace más asequibles". Entre otras características, la microautomatización entrega posibilidades más flexibles que los sistemas de control de plantas de mayor envergadura y según Roberto Hourton, Ejecutivo de Desarrollo y Servicio de Asistek, los PLCs más pequeños incluyen opciones de comunicación, para luego integrar una red y ser monitoreados fácilmente. Como señala Cristián González, Gerente de Ventas de Victronics y Director de la Asociación de la Industria Eléctrica-Electrónica, AIE, "hace cuatro años atrás estos pequeños sistemas se miraban con recelo y desconfianza, pero hoy son un estándar, porque ofrecen básicamente las mismas prestaciones que los grandes sistemas de control, pero orientados a una máquina específica". Además de ser la medida justa para pequeños procesos de automatización, Manuel Esquivel, Account Manager Central de Rockwell Automation Chile, explica que los microprocesadores permiten construir sistemas escalables y complementar una arquitectura más compleja en el caso de que los requerimientos del cliente cambien. "Esta ventaja es posible, entre otras cosas, a que el desarrollo de los micro-procesadores permite hoy tener amplias opciones de comunicación, lo que al mismo tiempo ha reducido los costos de operación y ha permitido entregar soluciones más rápidas y completas". Adiós a la caja negra Para los proveedores de este mercado, la microautomatización vino a llenar el vacío que quedaba entre el electricista y el ingeniero especialista en grandes sistemas, dando lugar a una importante generación de integradores especialistas en pequeños automatismos. Pero, los microprocesadores llegaron también para decir adiós a la caja negra que significaban en muchos casos los grandes y a la vez inaccesibles sistemas de automa-tización, al incluir entre sus ventajas conocidos estándares en el tema de interfaz de comunicación. En opinión de Fabián Hernández, Ejecutivo de Ventas y Proyectos de Interlog, "hasta hace poco existía solamente la lógica programable del relé y la gran diferencia de esos sistemas con los microprocesadores es que tienen la capacidad de informar fácilmente respecto a todo lo que hacen. Eso no sólo significa que pueden llevar a cabo el control de un proceso sencillo, que es su objetivo básico, sino que también rescatar la información relevante de esa automatización, haciéndolo más completo". Para establecer un valor agregado y lograr un lugar importante dentro del marketshare general del negocio de los microprocesadores -donde según los entendidos la principal desventaja es la capacidad limitada de los micropro-cesadores- Iván Venegas, Product Manager de General Electric, señala que cobran gran importancia temas como capacitación postventa, junto a una solución completa en el tema de automatización, lo que sumado a otros productos apunte a generar un estándar en el mercado. Más economía y escalabilidad En opinión de Rodrigo Tapia, Ejecutivo de Ventas de Fabelec, el concepto de microautomatización ha penetrado fuertemente en el mercado chileno. Sin embargo, a pesar de este desarrollo, Rodrigo Sepúl-veda, Product Manager de Automatización de Schnei-der Electric, indica que queda un trabajo importante por hacer respecto a la capacitación de los integradores especialistas en microprocesadores. "Estamos conscientes que las ventajas de estos sistemas están en entregar al cliente final una relación costo-beneficio conveniente, facilidad en la instalación y ventajas en términos de comunicación y para eso estamos trabajando intensamente en entregar al operario un buen conocimiento del equipo". Además de esta estrategia, empresas como Siemens encaran el tema de microautomation como soluciones integradas, es decir, entregándole al cliente soluciones preconfiguradas para una implementación más sencilla. Por su parte, Ariel Pérez, Gerente General de Sparq Technology, comenta que en general los PLCs pequeños son muy simples y sencillos de programar, "sin embargo, es importante tener en cuenta que cuando se trata de automatización de procesos críticos |