En conjunto con Endress+Hauser, se instalaron equipos de medición con sensores digitales y tecnología Memosens en celdas de flotación de molibdeno. Con ellos fue posible reorganizar el concepto de mantención de medición de pH, dado que por primera vez se realizaron las calibraciones en el laboratorio y no en la planta directamente. Por ejemplo, mediante la rotación de los electrodos, fue posible su limpieza, regeneración y calibración en laboratorio, siguiendo procedimientos técnicos según las necesidades operacionales. Anteriormente, cualquier trabajo en terreno involucraba el retiro, calibración in-situ y la reinstalación del electrodo en el punto de medición. Con los sensores digitales mejora la calidad de la medición, aumenta la vida operacional del electrodo y se reducen los costos de mantención y reemplazo de éstos, con el beneficio adicional de que al proceso se le entrega continuidad de medida.
Esta emergente tecnología permite un ventajoso modo de mantenimiento en un punto de medición de pH. En vez de limpiar, recalibrar y reutilizar el sensor directamente en terreno -como se hacía previamente-, sólo se reemplaza un sensor digital, lo que se traduce en que ya no es necesario que el transmisor se ubique al lado del sensor, y como resultado se logra que la instalación sea considerablemente más simple. Asimismo, se logra guardar información en el sensor que se puede usar para mantenciones avanzadas y, en particular, mantenciones predictivas de un punto de medición en especial.
Aplicación exitosa en minería
Armando Schneidewind Hinojosa, Ing. Especialista Senior de Sistemas de Instrumentación de Minera Los Pelambres, explicó que, con motivo del proyecto Repotenciamiento I, se definió trabajar con tecnología digital en sensores para medición de análisis de líquidos. "Tenemos la política de probar la última tecnología y que, por supuesto, nos dé ventajas. Debe ser confiable, robusta y producir el mínimo impacto en el proceso", sostuvo.
Dependiendo de la aplicación, la medición de pH y ORP requiere mantener las condiciones físicas del sensor y recalibrar los equipos hasta dos veces por semana, de tal forma que cualquier esfuerzo que se haga para disminuir los tiempos involucrados o la forma de hacer el trabajo, tiene gran influencia en la liberación de recursos y en el mejoramiento de la calidad del trabajo de los técnicos de terreno.
"El proceso de implementación de los medidores Memosens no estuvo exento de inconvenientes, pero con el apoyo de la oficina local de Endress+Hauser salimos adelante. Además de ser una tecnología sin contacto entre el sensor y la línea que va al transmisor, la calibración se almacena en el sensor, no en el instrumento transmisor. Por ello exploramos las ventajas de calibrar en laboratorio y no en terreno, lo que libera importantes recursos, tanto económicos como de tiempo de mantención, pues calibrar un equipo análogo en terreno toma como mínimo 20 minutos. Con esta nueva alternativa, se cambia sólo el sensor y la operación toma no más de 3 a 5 minutos por equipo, manteniendo por menos tiempo la medición del proceso fuera de servicio", indicó.
El profesional señaló que actualmente cuentan con 35 medidores de pH y 40 de ORP que se comunican a través de una red de Foundation Fieldbus al DCS, y que próximamente se incorporarán nuevas unidades en los circuitos de flotación rougher iniciales de la planta. "Ya los hemos incorporado como un estándar dentro de Minera Los Pelambres y forman parte de nuestro catálogo de componentes. Esa experiencia nos permitió incluirlos en los proyectos nuevos, como Tranque El Mauro y Repotenciamiento II, que vinieron con Memosens en sus procesos", sostuvo.
Beneficios de la tecnología digital
El uso de tecnología digital en sensores de pH y de OPR permite un ahorro en los costos directos de mantenimiento para mediciones de pH en línea, debido principalmente a la disminución del período de mantenimiento del punto de control; además de la confiabilidad de las mediciones, dado que las indicaciones de pH y ORP se encuentran disponibles en todo momento.
Otro de los beneficios detectados es que esta tecnología no sólo permite la obtención y evaluación de la información del proceso, sino también la realización de mantenimientos preventivos a través del software Memobase, que efectúa el seguimiento a la vida útil del sensor tanto en valores de taludes como en el punto cero. Esta herramienta, que permite al personal de mantenimiento realizar su labor en el período de tiempo adecuado basado en el trabajo predictivo, ahorra tiempo y extiende la vida útil de los electrodos de medición.