¿En qué consiste la Plataforma de Escenarios Energéticos Chile-2030?
La idea fundamental de este ejercicio era someter a debate público distintas visiones de la sociedad chilena para lo que debería ser la matriz eléctrica futura, en el entendido de que ello ya no sólo es una preocupación de la industria de la energía, sino de la sociedad en su conjunto, pues en cada decisión de inversión hay implicancias económicas, sociales, ambientales y "trade-offs" que van mucho más allá de la pura rentabilidad de esa inversión.

Los principales resultados fueron presentados y discutidos a principios de septiembre en el Seminario "Escenarios Energéticos 2010-2030. Construyendo Escenarios, innovando y rompiendo paradigmas: Discusiones hacia una visión energética-eléctrica para Chile", en el cual participaron los candidatos presidenciales Eduardo Frei, Marco Enríquez-Ominami y Sebastián Piñera.

En la práctica, ¿dónde podemos ver el trabajo que realizan?
Más allá del mencionado seminario, se creó una plataforma virtual de discusión -www.escenariosenergeticos.cl-, en la que se ha puesto a disposición pública la metodología elaborada para la evaluación de los escenarios, así como información relativa a costos, temas ambientales, sociales y de innovación. Asimismo, están los foros ciudadanos de discusión virtual en distintos temas relevantes y, paralelamente, estaremos realizando talleres de discusión abierta en temas claves identificados, como son Energías Renovables No Convencionales (ERNC), innovación, Eficiencia Energética (EE), redes inteligentes, cambio climático y el modelo marginalista.

¿Han llegado a algunas conclusiones?
Uno de los principales hallazgos de la iniciativa es que actores con visiones muy distintas sobre la matriz energética se pueden sentar juntos a dialogar en forma estratégica. También, a partir de la evaluación de los escenarios, podemos decir que ya hay un consenso generalizado de que no debemos guiarnos únicamente por parámetros de costos o inversión inicial al momento de definir la matriz energética del futuro para el país. Existen otros aspectos cruciales a considerar, como emisiones de carbono, impacto ambiental de una tecnología, uso del suelo y recursos hídricos, desarrollo local que puede producir un sistema de generación de energía limpia respecto al empleo, ganancias a mediano plazo o participación de comunidades locales en un determinado proyecto.

En el fondo, se trata de analizar los pro y los contra de todos los tipos de energía…
Exacto. Queremos fomentar un debate estratégico donde podamos analizar, en base a información consensuada y pública, los aspectos positivos y negativos de todos los tipos de energía, a fin de evaluarlos en el largo plazo, incluyendo todas sus externalidades económicas, ambientales y sociales.

En resumidas cuentas, constatamos que la matriz energética futura tiene una estrecha relación con el país que queremos construir como sociedad, y de ahí la importancia de que ello se pueda discutir en forma abierta y participativa y, a la vez, con información técnica de respaldo.

¿Qué otros aspectos conviene analizar?
Para Fundación Chile, uno de los temas importantes a incluir en este debate es el aspecto de la innovación, y cómo el país se prepara para absorber las nuevas tecnologías o los nuevos modelos de gestión que hagan más limpio el suministro y más eficiente el consumo. En la actualidad, en todo el mundo se están haciendo inversiones millonarias en innovación en Eficiencia Energética (EE), Energías Renovables No Convencionales, Tecnologías para el Control de las Emisiones de CO2 y Redes Inteligentes, entre otras tecnologías, por lo que debemos estar muy atentos para detectar cuándo estén maduras y competitivas.

Otro tema crucial será contar con capital humano preparado y potenciar a las empresas innovadoras que ofrecen productos o servicios para lograr lo anterior. En muchos países, la EE es una industria consolidada que genera mucho valor y crea nuevas empresas y empleos; por ende, Chile debe atreverse a participar en este nuevo nicho de negocio y tener un espacio que le permita no sólo responder a la demanda interna, sino también pensar en exportar soluciones a otros mercados, como el latinoamericano.

Lamentablemente, Chile se sumó un poco tarde al "tren de la innovación" en energía, pero ya se empiezan a ver los esfuerzos por recuperar el tiempo perdido, tanto en el mundo público como privado, con iniciativas piloto y fases demostrativas, así como con modificaciones regulatorias que está impulsando la autoridad.

Lo más importante es que ya se quebró la tendencia y el tema se ha instalado en la agenda nacional. Chile tiene hoy la oportunidad de aprovechar en el corto plazo la Eficiencia Energética y, a la vez, ser un adoptador temprano de las nuevas tecnologías limpias, para hacer más competitiva su economía y alinearse con las tendencias mundiales para el futuro.