En el ámbito de la electrónica de potencia, ¿cuáles son los nuevos requerimientos de la Minería? Se aprecian dos tendencias. La primera es que las necesidades de las compañías mineras están apuntando a resolver la problemática energética -especialmente con energías renovables como son las iniciativas en el desarrollo eólico y solar- a través de procesos sustentables y medioambientalmente seguros. La segunda es que están solicitando equipos contenerizados, a cargo de un proveedor único capaz de suministrar soluciones integrales e integradas, desde el principio hasta el fin de los proyectos. Las empresas están solicitando soluciones completas -transformadores, equipos de media y baja tensión-, todo montado en salas eléctricas transportables y con un solo proveedor responsable en precio, plazos y calidad. ¿Cuál es la valoración de la oferta local por parte del mercado? Muchas empresas mineras que requieren soluciones en el ámbito de la electrónica de potencia generalmente miran a los proveedores locales con una cierta desconfianza; todavía sitúan a los internacionales en primer lugar. Eso, definitivamente, no ha cambiado. Sólo por mencionar un ejemplo: nosotros nos hemos demorado cerca de 15 años para que nos consideren seriamente. Y en mercados como los partidores de media tensión, convertidores de frecuencia o inversores, las soluciones provistas por empresas nacionales son aún una excepción. Las grandes empresas buscan proveedores confiables y que tengan respaldo local. En ese sentido, la clave de IDT ha sido la especialización que hemos alcanzado y nuestro foco en rectificadores. Nosotros, por ejemplo, fabricamos los rectificadores de potencia para electrodepositación y refinería, un equipo crítico para la minería, donde una falla puede costar miles de dólares por hora. ¿Cuáles son los avances más recientes en rectificadores? Existen distintos niveles de avance, dependiendo de la aplicación; pero diría que el tema de la Eficiencia es muy importante, al igual que la Confiabilidad, y allí están los desarrollos más importantes. Por ejemplo, en IDT tenemos una nueva patente para un rectificador de tres barras, que permite hacer más eficiente la operación. En la actualidad la eficiencia de los rectificadores es muy alta -del orden de 96%-, pero nosotros creemos que podemos aumentarla incluso más -en torno a 97% ó 98%-, lo que es un gran paso, porque un 1% de eficiencia en el rectificador es equivalente a su valor en 20 años de operación. En el segundo aspecto, el de la Confiabilidad, los ojos están puestos en la disminución de los costos de falla como objetivo central; por lo tanto, los avances tienen que ver con la búsqueda de soluciones robustas y fáciles de reparar. ¿Qué proyecciones tienen para el futuro inmediato? IDT está apostando fuerte en salir con su tecnología y abrirse un espacio en el mundo de los proveedores mundiales de rectificadores de potencia. Como primer paso, estamos abriendo una fábrica en USA, principalmente porque conocemos muy bien nuestra tecnología, su importancia en el proceso del cobre, y sabemos que tenemos algo valioso que aportar. |