Enaex fue fundada en 1920. Adquirida por el Estado en 1972, fue comprada por un consorcio privado liderado por Austin Powder en 1987. Tres años más tarde, el grupo nacional Sigdo Koppers adquirió un porcentaje importante de la compañía y posteriormente mayores participaciones que le permiten actualmente controlarla. En 1999, la compañía inició la producción de su planta de nitrato de amonio (grado An-fo) en Mejillones, con una producción de 350.000 toneladas por año. Enaex está orientada al área de servicios de fragmentación de rocas para la minería, la fabricación de nitrato de amonio y explosivos, manteniendo plantas de servicios en diversas faenas mineras como Escondida, Chuquicamata-RT, Cerro Colorado, Soquimich, El Abra y Pelambres, entre otras, donde dispone de silos para almacenar materias primas para la producción de explosivos. Estas sustancias son nitrato de amonio en prill (perdigones) y emulsión matriz, las que mezcladas in situ en las perforaciones de tronadura de una mina forman un explosivo de gran potencia. En sus plantas de servicio, la compañía dispone de silos para el almacenamiento de nitrato de amonio y emulsión matriz, cuyos niveles son supervisados en forma manual, lo que implica que el personal debe subir hasta los silos –ubicados a más de 15 metros de altura- para medir el stock y asegurar el normal abastecimiento de esos insumos. Por tal motivo, Enaex decidió automatizar el proceso de control de inventario, contratando los servicios del fabricante de sistemas de medición industrial Endress+Hauser, el cual instaló dos medido-res –uno tipo radar y otro de microonda guiada- para la medición del nivel de un silo de matriz y uno de nitrato de amonio, respectivamente. La instalación se llevó a cabo a principios de este año y la mina elegida para efectuar el procedimiento fue Escondida. Reposición exacta y oportuna del inventario Según señala San Martín, Enaex mantiene actualmente contratos con varias empresas mineras –como se mencionó- para entregar un servicio completo de tronadura. "Nuestra unidad logística, que debe repartir las materias primas en las plantas de servicio, tiene que tener muy claro los niveles de stock para saber con exactitud cuándo efectuar la reposición. Antes, los datos llegaban de manera atrasada. Hoy el objetivo es trasmitir a larga distancia y de manera automática e instantánea hasta las oficinas de Santiago", señala el ejecutivo. Los dos medidores instalados por Endress+Hauser, a través de su oficina ubicada en Santiago, fueron comunicados vía protocolo Hart a un Fieldgate, unidad de comunicación remota que envía la señal de nivel vía Ethernet a la Intranet de Enaex. "Desde esta red cualquiera de nuestros funcionarios pueden observar los niveles de inventario de estos silos, ya sea en las mismas plantas o en la oficina central", señala San Martín. Agrega que incluso integraron al proyecto al personal de sistemas, el cual se encargó de crear una interfaz propia para poder ver los datos de la forma que estimaban pertinente. De esta manera, hoy la compañía es capaz de realizar en forma exacta la reposición de stock de inventario, asegurando el suministro ininterrumpido de explosivos a los usuarios y mejorando adicional-mente el nivel de información on-line de sus procesos. En esta tarea Fieldgate cumple un rol fundamental, ya que es un servidor web que transfiere datos bajo una dirección IP, con protocolos estándares, los cuales son puestos en un web browser y visualizados en un PC. Además, el protocolo Hart es de carácter universal, por lo cual es capaz de entenderse con instrumentos y protocolos de última generación. Amparados en la tecnología y el servicio Además de que Fieldgate es un sistema pequeño y sencillo de instalar, una de sus grandes ventajas, a juicio de San Martín, radica "en que el sistema permite comunicarse con los instrumentos, ya que no sólo se recibe la información de la señal, sino que también permite acceder y calibrar el instrumento desde la oficina". Agrega que más allá de disponer hoy de información instantánea para tomar decisiones adecuadas, Enaex está pensando a futuro y pretende, en el mediano plazo, tener los 50 silos en línea. "Queremos utilizar el sistema para otras aplicaciones que no sean sólo niveles, como por ejemplo para el área de mantención. Por medio de un odómetro queremos llevar una contabilidad exacta de las horas de operación de las bombas", enfatiza el ejecutivo.  Asimismo, sostiene que los primeros instrumentos comprados a Endress+Hauser fueron en 1982, a través de su representante local, y consistían básicamente en sensores de flujo y de nivel automatizados, para su planta de explosivos en Calama. Como señala San Martín, "las cosas se dieron bastante bien y le tomamos confianza a la marca. Después, en Mejillones en la nueva planta de Nitrato de amonio se utilizó una gran cantidad de instrumentos Endress+Hauser. Esta confianza se mantiene hasta el día de hoy, gene-rándose gran acercamiento y comunicación, especialmente con los ejecutivos y técnicos que nos han atendido hasta la fecha".
Para San Martín, la confianza y el servicio con el proveedor son las razones que llevan a decidirse finalmente por uno u otro producto. "Hemos contando con su apoyo cuando lo hemos requerido, en especial en el área de servicio técnico.
Endress+Hauser cuenta con disponibilidad de personal a nivel local en las zonas mineras para atender nuestros requerimientos y las maquinarias con las que trabajamos, lo que nos tranquiliza mucho, porque no hay nada peor que quedar desamparado, sobre todo en materia de tecnología". |
