Los usuarios le conceden una importancia cada vez mayor a la integración de funciones de seguridad según los estándares válidos. Los fabricantes, por su parte, deben cumplir esos parámetros aplicando el siguiente criterio: "Reducir riesgos, actuar preventivamente". Este planteamiento no solamente se aplica en las operaciones de alimentación manual de piezas, sino también en trabajos de ajuste, durante las reparaciones y el mantenimiento y en la fase de puesta en servicio de las máquinas. Las funciones de emergencia deben activarse correctamente, como parada confiable y escape seguro del aire. Las funciones de seguridad cubren la totalidad de la cadena de control, empezando por la preparación del aire comprimido, pasando por los actuadores y válvulas y llegando hasta las unidades de control.

Rapidez y seguridad

En términos de seguridad de los procesos, el empleo de una válvula de arranque progresivo y escape rápido es la solución apropiada. En caso de producirse una parada de emergencia en máquinas críticas en cuanto a la seguridad, esta tecnología interrumpe de inmediato la alimentación de presión dejando escapar el aire rápidamente, por lo que ofrece suficiente seguridad a los operarios y a las máquinas. El escape es de 6.000 l/min., es decir, 1,5 veces más rápido que la alimentación de aire comprimido.

Gracias a la función redundante de una válvula de arranque progresivo se obtiene un nivel de seguridad clasificado como "seguridad ante fallo simple". Ello significa que al surgir un fallo en el equipo, el escape se produce siempre y de modo completamente confiable. La válvula normalizada según DIN EN 954-1, categoría 3 y, además, según la nueva norma DIN EN IS0 13849-1, PL d, ofrece un alto nivel de seguridad al fabricante y al usuario. Otra ventaja: gracias a las compactas dimensiones del producto, su montaje es muy sencillo, ya sea como parte de las unidades de mantenimiento o como válvula individual.

Doble fuerza

Procesos seguros con la válvula de arranque progresivo y escape rápido.

¿Qué hacer si le falta aire a la máquina porque la presión de funcionamiento no es suficiente para generar la fuerza necesaria? En este caso, un intensificador de presión es la solución. Esta unidad duplica la presión de entrada de modo puramente mecánico y sin recurrir a energía externa. El intensificador se presenta en tres tamaños (desde 40 hasta 100 mm), cada versión con dos niveles de presión. Por lo tanto, se puede elegir la unidad que ofrece el aumento necesario de la presión, ya sea como versión estándar, como variante sin regulador o como versión completa y preconfeccionada.

Adicionalmente, una variante de intensificadores de presión con función de detección mediante imán integrado en el nuevo sistema de émbolos, ofrece ventajas adicionales. Con ella es posible, por ejemplo, registrar la frecuencia de activación y verificar si su tamaño es el correcto. Al mismo tiempo, este sistema de detección también hace las veces de sistema de detección preventiva, lo que contribuye a aumentar su duración y, además, permite controlar los intervalos entre acciones de mantenimiento. Gracias al diseño compacto del intensificador, puede montarse en cualquier posición para aprovechar óptimamente el espacio disponible, aunque éste sea muy justo.

Una solución eficiente

Para que los procesos sean seguros y los componentes duraderos, es indispensable disponer de aire limpio y seco. Secando el aire de modo descentralizado se reducen los costos, los procesos resultan más confiables, se prolonga la duración de los componentes y se minimizan los costos de mantenimiento. Para conseguir resultados satisfactorios, un secador por absorción es lo más apropiado. Funciona con dos puntos fijos de condensación bajo presión: -40°C ó -70°C. La sustitución del cartucho filtrante es muy sencilla. En general, su utilización es fácil gracias al display integrado que muestra los ciclos de secado y la necesidad de realizar el mantenimiento preventivo. Otros datos importantes: elevado caudal de hasta 1.000 l/min., bajo consumo de aire de enjuague, bajo nivel de ruidos y máximo rendimiento de secado. Además, cumplimiento de las clases 2 y 1 (humedad) según norma DIN ISO 8573.