¿En qué consiste el monitoreo on line de transformadores de poder?
Estamos hablando de sistemas de seguimiento en tiempo real de distintos parámetros relacionados con el funcionamiento de un transformador en una industria o empresa. Esta tecnología es una ayuda muy grande para el mantenimiento predictivo de un equipo, ya que al vigilar y monitorear su estado se pueden prevenir anormalidades importantes o fallas en su desempeño, con el consiguiente ahorro de los no deseados costos de falla.

Los transformadores son equipos críticos y estratégicos; por eso es conveniente fijarse en sus niveles de aceite, humedad, gases disueltos, temperatura y estado de sus componentes, entre otros factores.

¿Cuáles son las ventajas de este tipo de tecnología?
Al tener el transformador vigilado en línea con un software de ingeniería, dispones de una gran cantidad de datos organizados que permiten hacer una proyección a futuro, analizando los resultados que se comparan en el tiempo. Además, y en caso de que se produzca una desviación, estos programas cuentan con alarmas que le avisan al PC o celular del usuario cuándo y dónde se produjo el problema. Así, junto con evitar fallas que puedan ocasionar paradas de planta y pérdidas millonarias, llevas un registro histórico del funcionamiento del transformador para realizar mantenimientos "bajo condición", es decir, que no se efectúan en períodos fijos sino cuando el equipo lo requiera.

Otro punto importante es que, en algunos países, las compañías de seguros para los activos ofrecen primas que disminuyen considerablemente si los transformadores cuentan con un sistema de monitoreo on line, porque se garantiza un mejor rendimiento y cuidado.

¿Se requiere de una inversión muy alta?
Depende de las necesidades y parámetros que se desee monitorear, pero estamos hablando de inversiones que pueden ir desde un poco menos de US$10.000 hasta los US$100.000. Respecto de este punto, es importante tener presente que cuando las empresas compran un transformador -que puede costar US$1 millón-, gastar, por ejemplo, US$50.000 para resguardar y monitorear su labor es un gasto ínfimo en comparación a los beneficios que reporta esta tecnología.

¿Cómo se encuentra Chile respecto a este tema?
Los primeros monitores electrónicos digitales llegaron a nuestro país en 1991 para medir la temperatura de estos equipos. Y, después de ver su funcionamiento, varias empresas decidieron invertir en ellos, porque se dieron cuenta que era rentable. Actualmente, el mercado local está cada vez más consciente de la importancia de medir las variables que inciden en el funcionamiento de un transformador de poder, pero aún quedan sectores poco convencidos de esta tecnología, por lo que nuestra labor de consultoría es fundamental.