Canacero, la cámara mexicana de hierro y acero, refutó las afirmaciones de senadores estadounidenses que advierten que el aumento de las exportaciones de acero mexicano a Estados Unidos representa una amenaza para la industria local.

Según Canacero, las cifras presentadas por 14 senadores estadounidenses y enviada al asesor de seguridad nacional Jake Sullivan están desactualizadas, pues se referirían a datos de 2022, “año muy particular para el mercado global del acero por razones externas e incontrolables, por lo que el análisis debe centrarse en el comercio bilateral actual, 2023”.

La entidad asegura que México “es quien está preocupado por el constante aumento de las exportaciones de productos de acero terminado de EE.UU. a nuestro país; somos su principal destino de exportación y ocupan el 14,6% de nuestro consumo, mientras que las exportaciones de México a EE.UU. representan apenas el 2,6% de su consumo”.

De acuerdo con la misiva de los legisladores estadounidenses, las importaciones anuales de hierro y acero procedentes de México han crecido cerca de un 73% con respecto a la base de referencia de 2015-17, “en violación del acuerdo conjunto sobre acero y aluminio de 2019”.

"Este aumento del acero ya ha provocado el cierre de al menos una planta, la pérdida de más de 1.000 puestos de trabajo nuevos y antiguos y el aplazamiento de cientos de millones de dólares en nuevas inversiones", señala el documento.

“No concluir un acuerdo de monitoreo de exportaciones debido a la falta de voluntad o incapacidad del Gobierno mexicano es inaceptable. Instamos a la administración a que fije un plazo claro para la implementación de un acuerdo de monitoreo de exportaciones”, indica la carta.

"Si México no cumple con este plazo o demuestra que no puede o no quiere hacer cumplir efectivamente el acuerdo conjunto de 2019, instamos respetuosamente a la administración a tomar medidas decididas para contrarrestar el aumento de las importaciones de acero mexicano", concluye.