El gasto en construcción de Estados Unidos repuntó inesperadamente en noviembre, impulsado por el aumento de las estructuras no residenciales, por el alza de las tasas hipotecarias.

El Departamento de Comercio indicó recientemente que el gasto en construcción subió un 0,2% en noviembre de 2022, tras caer un 0,2% en octubre. Los economistas encuestados habían pronosticado que el gasto en construcción descendería un 0,4 por ciento.

El dato de noviembre reveló que el gasto en construcción aumentó un 8,5% anual.

El gasto en proyectos de construcción privada avanzó un 0,3% tras descender un 0,7% en octubre. La inversión en estructuras privadas no residenciales, como la perforación de pozos de gas y petróleo, aumentó un 1,7 por ciento.

Pero los gastos en construcción residencial cayeron un 0,5%, con un descenso de 2,9% en los proyectos de viviendas unifamiliares. Los gastos en proyectos de viviendas multifamiliares aumentaron un 2,4%, beneficiándose de la fuerte demanda de viviendas de alquiler.